En Bolivia, un grupo de investigadores del Museo Natural Noel Kempff Mercado llevó a cabo recientemente un importante operativo de rescate en la región de Santa Cruz. Durante varios días, intentaron salvar a decenas de bófeos o delfines rosados de agua dulce que habían quedado atrapados en pequeños cuerpos de agua alimentados por el río Grande, debido a la drástica reducción del caudal. Después de un cuidadoso esfuerzo, lograron liberar a un total de 27 ejemplares, en lo que se considera hasta ahora el mayor rescate de este tipo en la zona.
¿Qué pasó y cómo se desarrolló el rescate?
El operativo, realizado entre el 21 y el 25 de junio, se centró en el municipio de San Pedro, zona conocida por sus humedales interconectados y por ser hogar de estos delfines amazónicos en declive. El descenso del nivel del agua dejó a los mamíferos —principalmente hembras, juveniles y algunos neonatos— varados en charcas aisladas, lo cual los hace vulnerables a estrés, cambios bruscos de temperatura o depredadores.
Al observar esta situación crítica, los equipos intervinieron para trasladarlos a zonas del río Grande que aún conservaban suficiente caudal, dentro del área protegida gestionada por la Unidad de Conservación del Patrimonio Natural (UCPN) de los Humedales del Norte, dependiente de la Gobernación de Santa Cruz.
Quienes fueron rescatados y por qué es significativo
Este grupo de bófeos incluye una amplia diversidad etaria y está conformado en su mayoría por hembras, muchas de ellas con crías o en periodo de gestación, lo que refuerza el éxito y la prioridad del rescate, al proteger a los más vulnerables. La intervención es especialmente relevante porque Inia boliviensis, la especie local, fue declarada Patrimonio Natural de Bolivia (2012), Patrimonio Cultural del Beni y se encuentra catalogada como vulnerable por la UICN.
¿Por qué ocurren estos eventos?
Las hembras, especialmente las que están gestando o criando, buscan zonas seguras y de corrientes leves, ideales para proteger a sus crías. Sin embargo, en temporada seca, cuando el nivel del río baja, estas áreas quedan aisladas, atrapando a los delfines en charcas que se secan rápidamente.
Amenazas y retos para la conservación
El bófeo amazónico enfrenta múltiples amenazas: contaminación, deforestación, alteraciones del curso de los ríos y ruido de motores fuera de borda, que interfieren con su ecolocalización. A esto se suman los efectos de la sobrepesca y el cambio climático.
El rescate fue coordinado por el Programa de Conservación del Bufeo del museo, que actualmente opera con recursos limitados, combinando apoyos públicos y privados para financiar sus operativos.
¿Y ahora qué?
Los 27 delfines se encuentran seguros en áreas habilitadas dentro de la UCPN, con el chip de identificación implantado en algunos de los adultos para monitorear su salud y comportamiento futuro.
Este tipo de acciones no solo salvan vidas individuales, sino que también contribuyen a mantener el frágil equilibrio ecológico de los humedales amazónicos en Bolivia, y resaltan la urgencia de fortalecer la conservación de esta especie única.