Sergio Pérez no ha tenido un Gran Premio de Japón como esperaba y las complicaciones del viernes se trasladaron hasta la sesión del domingo donde quedó fuera de la competencia tras una serie de incidentes en la primera mitad de la competencia.
En el arranque, de inmediato fue presionado por el Ferrari de Carlos Sainz por el interior llegando al contacto. Esto lo envió sobre el Mercedes de Lewis Hamilton provocando daños en su alerón delantero. Red Bull llamó de inmediato al mexicano a los pits para cambiar la pieza.
“Una arrancada complicada porque desde que solté el clutch empecé a patinar, porque los neumáticos se enfriaron bastante, no tuve nada de tracción y, luego, llegando a la primera curva me hicieron sándwich Sainz y Hamilton y me quedé en medio”, expresó el mexicano a los micrófonos de FOX Sports México.
Checo Pérez comenzó a remontar hasta acercarse a la pelea por la zona de los puntos y su rival para ello era el Haas del danés Kevin Magnussen. Cuando el mexicano intentó atacar por el interior llegaron al contacto provocando un trompo para el competidor del equipo americano. Este golpe provocó un completo daño en la puesta a punto obligando al equipo a retirar el coche, o al menos así parecía hasta ese momento.
“Tenía el auto dañado y era muy difícil seguir a Magnussen en las curvas rápidas, sabía que lo tenía que intentar en la lenta. Cuando me metí ya no tuve más espacio más que tocar a Magnussen. Fue totalmente mi culpa”.
Pérez se bajó del coche, pero regresó después al circuito en una estrategia de Red Bull para asegurarle dar la cantidad de vueltas mínimas que le permitieran clasificar en la carrera y, con ello, sumarle el tiempo de sanción que podría llegar por el contacto con el danés y no pagar este castigo en Qatar. “Esa fue la razón por la que regresamos”.
Además, previamente, había sido penalizado con cinco segundos por no respetar el proceso de aceleración durante el safety car del arranque de la carrera.
Mientras él veía la carrera desde los pits, Red Bull lograba su sexto campeonato de constructores gracias a la victoria de Max Verstappen.
“Es un día bueno para el equipo, no tan bueno para mí, es un buen día para consolidar el campeonato de constructores y ganar ese campeonato”, finalizó.