El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) anunció el 6 de agosto de 2025 su impulso para declarar al Museo Experimental El Eco, en la Ciudad de México, como Monumento Artístico, un reconocimiento que busca proteger este espacio icónico diseñado por Mathias Goeritz en 1953.
La iniciativa, que responde a la relevancia cultural del museo, ha sido aplaudida, pero también enfrenta críticas por la lentitud burocrática y el deterioro del inmueble.
El Eco, ubicado en la colonia San Rafael, es una obra maestra del expresionismo arquitectónico, concebida por Goeritz como un “manifiesto emocional” que combina arte, arquitectura y espacio. Su diseño minimalista, con muros angulados y un corredor amarillo, desafió las convenciones de su época, influenciando a generaciones de artistas. Sin embargo, el museo ha sufrido años de abandono, lo que pone en duda la efectividad de la declaratoria sin un plan de restauración.
La declaratoria de Monumento Artístico, según el INBAL, garantizaría la preservación del museo bajo la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicas, Artísticas e Históricas. Esto implicaría restricciones para modificaciones y un compromiso gubernamental para su mantenimiento. Sin embargo, activistas culturales señalan que otros monumentos, como el Palacio de Bellas Artes, han enfrentado problemas similares pese a su estatus, lo que genera escepticismo.
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El Eco fue rescatado en 2005 por la UNAM, que lo convirtió en un espacio para arte contemporáneo, pero su infraestructura sigue deteriorándose. Problemas como filtraciones y grietas han sido denunciados por artistas y curadores, quienes temen que la declaratoria sea un gesto simbólico sin impacto real. El INBAL ha prometido un diagnóstico estructural, pero no ha especificado plazos ni presupuesto.
La iniciativa también busca visibilizar el legado de Goeritz, un artista alemán-mexicano cuya obra, como las Torres de Satélite, marcó el modernismo mexicano. El Eco, con su enfoque en la experiencia sensorial, es considerado un precursor de las instalaciones contemporáneas, pero su relevancia ha sido opacada por la falta de difusión. Algunos críticos sugieren que el INBAL debería priorizar exposiciones internacionales para reposicionar el museo.
El proceso para la declaratoria requiere la aprobación de la Secretaría de Cultura y la publicación en el Diario Oficial de la Federación, un trámite que podría tomar meses. Esto ha generado críticas de la comunidad artística, que exige mayor agilidad en un contexto donde el presupuesto cultural se ha reducido un 10% en 2025. La falta de recursos podría limitar las acciones de conservación, incluso con el estatus de monumento.
El Eco también enfrenta retos urbanos. La gentrificación en San Rafael ha encarecido los alrededores, alejando a artistas emergentes que antes usaban el museo como plataforma. Algunos vecinos apoyan la declaratoria, esperando que atraiga turismo cultural, pero otros temen que incremente la especulación inmobiliaria, un problema que ya afecta a la colonia Roma.
La comunidad artística ha respondido con propuestas para activar el museo, como residencias y talleres, pero estas iniciativas dependen de financiamiento. El INBAL ha mencionado posibles alianzas con fundaciones privadas, pero esto ha generado debate sobre la privatización del patrimonio cultural, un tema sensible tras la polémica por la gestión del Bosque de Chapultepec.
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La declaratoria también tiene un trasfondo político. En un año electoral, algunos ven la iniciativa como un intento del gobierno de Sheinbaum de reforzar su imagen cultural. Sin embargo, la falta de avances concretos en otros proyectos del INBAL, como la restauración del Polyforum Siqueiros, sugiere que el anuncio podría quedarse en buenas intenciones.
El Museo Experimental El Eco, con su historia de resistencia y reinvención, merece un lugar en el patrimonio nacional, pero su futuro depende de acciones concretas. La declaratoria es un paso simbólico importante, pero sin inversión y compromiso, el legado de Goeritz podría seguir en riesgo, dejando a México con un monumento más en el papel que en la realidad.
Con información de INFOBAE.