Un informe entregado por el Gobierno de México al Senado revela que los cárteles mexicanos favorecen el uso de armamento exclusivo del Ejército de Estados Unidos, adquirido ilegalmente a través de al menos cinco cruces fronterizos formales.
México revela el uso de armas proveniente de EE. UU.
Estas armas, compradas en el mercado negro de estados como Washington, Georgia, Florida, Utah, Colorado y Missouri, encuentran su camino hacia México, principalmente a través de los puntos de entrada en Tijuana, Baja California; Nogales, Sonora; Ciudad Juárez, Chihuahua; Ciudad Acuña, Coahuila, y Ciudad Miguel Alemán, Tamaulipas, con Chiapas como destino final.
El informe detalla que las armas preferidas por los cárteles son de uso exclusivo del Ejército de EE. UU. y resalta que la mayoría de estas armas termina en Chiapas.
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Se estima que aproximadamente 200 mil armas de fuego ilegales ingresan a México anualmente, contribuyendo significativamente al poderío del crimen organizado.
La Agencia de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego de EE. UU. (ATF) reveló que entre 2017 y 2021, las autoridades mexicanas realizaron 91,791 solicitudes para rastrear el origen de armas utilizadas en actos criminales.
El informe también menciona una demanda de México contra varias empresas estadounidenses dedicadas a la producción de armamento que termina en manos del crimen organizado en México.
Entre las empresas demandadas se encuentran Colt’s Manufacturing Company, Barrett Firearms Manufacturing, Beretta USA, Smith & Wesson, Century International Arms, Glock Ges.m.b.H, Sturm, Ruger & Co, Beretta Holding, Glock, Inc, Interstate Arms y Witmer Public Safety Group.
Colt, una de las empresas destacadas en la demanda, ofrece armamento a través de su página de venta en línea, donde se pueden adquirir revólveres y rifles utilizados por fuerzas militares y policías.
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La demanda estima los daños por el tráfico de armas en 15 mil millones de dólares, mientras que la industria armamentista enfrenta acciones legales, los cárteles en México se benefician de armas más poderosas, alimentando la espiral de violencia en el país.