¿Surfistas irresponsabes? El pasado martes 25 de septiembre, en plena actividad de la tormenta tropical “Helene”, un grupo de personas desafiaron las medidas de seguridad impuestas debido a la alerta roja.
A pesar del cierre del puerto y las recomendaciones para evitar ingresar al mar, varios individuos decidieron surfear en las playas del municipio de Solidaridad.
Surfistas retan a la tormenta Helene
Esta acción irresponsable fue detectada por los agentes del orden público, quienes tuvieron que intervenir para disuadir a los infractores.
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Durante una sesión extraordinaria del Comité Operativo Especializado de Fenómenos Hidrometeorológicos, Raúl Alberto Tassinari González, secretario de Seguridad Ciudadana, informó que a pesar de la bandera roja izada en las playas, que indica la prohibición de entrar al mar, algunas personas decidieron seguir adelante con su actividad.
Estas personas solo recibieron un llamado de atención por parte de los agentes, sin que se registraran mayores incidentes o daños que lamentar.
El secretario Tassinari González aprovechó la ocasión para hacer un llamado enérgico a la población, especialmente a aquellos que practican deportes extremos como el surf, a evitar ingresar al mar durante este periodo de mal tiempo.
Subrayó los peligros que representa el oleaje elevado, no solo por las fuertes corrientes, sino también por la presencia de piedras y otros objetos que, al no ser visibles por el movimiento del agua, podrían causar graves lesiones.
Además, indicó que la policía turística, en coordinación con oficiales de la Marina, han estado realizando recorridos a lo largo de la costa, desde Sandos Playacar hasta el hotel Vidanta, con el fin de garantizar la seguridad de los ciudadanos y evitar incidentes mayores. La vigilancia se mantendrá activa durante toda la duración de la tormenta.
Cazadores de tormentas en Quintana Roo
Cabe destacar que, aunque las playas del municipio de Solidaridad no presentan un oleaje tan fuerte como en otras regiones, existe un grupo de aficionados al surf que, en su afán por desafiar las olas más altas, se convierten en “cazadores de tormentas”.
Estas personas suelen aprovechar los fenómenos meteorológicos como “Helene”, que incrementan la altura y volumen de las olas, para practicar su deporte.
Sin embargo, las autoridades locales han enfatizado que la prioridad en estos momentos es la seguridad de todos los ciudadanos, instando a la población a respetar las medidas preventivas y a mantenerse alejados del mar hasta que las condiciones climáticas mejoren.
