En lo profundo de los frondosos bosques del este de México, se desarrolla uno de los fenómenos migratorios más asombrosos del mundo: la hibernación, descanso y reproducción de las mariposas monarca. Estas delicadas criaturas recorren aproximadamente 4,500 kilómetros desde diversas regiones de Canadá y Estados Unidos para escapar del gélido invierno, encontrando refugio en los cálidos y acogedores bosques mexicanos.
Cada año, las mariposas monarca protagonizan un espectáculo natural fascinante en seis santuarios repartidos por el territorio mexicano, brindando una experiencia única que se ha convertido en uno de los mayores atractivos ecoturísticos del país. Para que no te pierdas la temporada 2024-2025 de este maravilloso evento natural, aquí tienes una guía completa que incluye ubicaciones clave, costos y opciones de tours que parten desde la Ciudad de México.
El viaje de las mariposas a México no es una novedad. Desde el año 2000, se ha protegido su hábitat en la Reserva de la Biósfera Mariposa Monarca, un espacio natural que abarca majestuosas montañas cubiertas por vastos bosques de oyameles, con elevaciones que superan los 3,000 metros sobre el nivel del mar. Este santuario, de valor incalculable para la biodiversidad, fue reconocido en 2008 por la Unesco, que lo incluyó en la lista del Patrimonio de la Humanidad, destacando su importancia como un fenómeno migratorio único y especial.
¿Dónde se encuentran los Santuarios de la Mariposa Monarca?
La extensa reserva, que abarca 562 kilómetros cuadrados, se distribuye entre varios municipios. En el Estado de México, incluye Temascalcingo, San Felipe del Progreso, Donato Guerra, San José del Rincón y Villa de Allende, mientras que en Michoacán abarca Contepec, Senguio, Angangueo, Ocampo, Zitácuaro y Aporo. Durante la temporada 2024-2025, que comenzará oficialmente el 27 de noviembre de 2024 y se extenderá hasta finales de marzo de 2025, se espera que la afluencia de visitantes sea alta. Es recomendable planear tu visita en el mes de febrero, cuando las mariposas monarca están más activas y se preparan para emprender su vuelo de regreso hacia el norte, llenando los cielos de vida.
Febrero y marzo son meses excepcionales para visitar los santuarios, ya que, incluso fuera de estas áreas protegidas, se pueden ver miles de mariposas revoloteando por los cielos. Michoacán es, sin duda, el estado más reconocido por recibir a la mariposa monarca, que ha adoptado como uno de sus símbolos más icónicos. Los santuarios de Michoacán no solo atraen a quienes desean maravillarse con la migración, sino que también ofrecen un punto de encuentro con la naturaleza y la cultura local.
Entre los santuarios más importantes de Michoacán destacan El Rosario, el más grande y concurrido, que alberga la mayor concentración de mariposas. Situado cerca del encantador pueblo mágico de Angangueo, este santuario cuenta con diversos servicios, incluyendo un restaurante, puestos de artesanías y comida, así como la posibilidad de recorrerlo a caballo. El costo de entrada es de 90 pesos para adultos y 70 para niños. Otro santuario relevante es Sierra Chincua, ubicado cerca de la frontera con el Estado de México. Aunque más pequeño, ofrece una experiencia similar con artesanías locales y comida mexicana. La entrada aquí cuesta 100 pesos para adultos y 70 para niños. Finalmente, Senguio, el más pequeño y menos accesible, se localiza al norte de la reserva, ofreciendo también una experiencia más íntima y remota.
El pueblo mágico de Angangueo es el principal punto de referencia para quienes visitan estos santuarios en Michoacán, estando a solo 20 o 30 minutos en coche de ellos. Desde la capital del estado, Morelia, el recorrido toma unas dos horas y media, mientras que desde la Ciudad de México el trayecto es de aproximadamente tres horas y 20 minutos.
En el Estado de México, también se pueden visitar tres santuarios destacados. El más conocido es Piedra Herrada, localizado en las faldas del Nevado de Toluca, en la comunidad de San Mateo Almomoloa. Este santuario ofrece una amplia gama de servicios, como restaurantes, cabañas, paseos a caballo, y venta de artesanías. Otro santuario importante es El Capulín, situado en la base del Cerro Pelón, en los límites con Michoacán, que también cuenta con cabañas y áreas recreativas. Por último, La Mesa, el más cercano a la zona núcleo de la Reserva de la Biósfera, se encuentra en la Sierra Campanario y ofrece una experiencia más cercana a la naturaleza con restaurantes y miradores.
Aunque aún no se han anunciado las tarifas oficiales para la temporada 2024-2025 en los santuarios del Estado de México, se espera que oscilen entre 80 y 100 pesos para adultos, y entre 50 y 70 pesos para niños.
Para los viajeros que buscan explorar la región más allá de los santuarios, los pueblos mágicos de El Oro y Tlalpujahua, ambos situados a menos de una hora en coche de La Mesa, ofrecen una experiencia adicional de turismo cultural y natural. Desde la Ciudad de México, el trayecto a los santuarios en el Estado de México toma entre dos y tres horas, y desde Toluca, el recorrido se reduce a entre una y dos horas.
Con tanto por descubrir, la temporada de la mariposa monarca se convierte en un espectáculo que no solo asombra por la belleza de las mariposas en sí, sino también por la riqueza cultural y natural que rodea a estos santuarios, ofreciendo a los visitantes una experiencia integral.