A casi diez meses del inicio de la Copa Mundial de la FIFA 2026 —programada para comenzar el 11 de junio de 2026 en este recinto—, los trabajos de modernización del histórico Estadio Azteca ya están en marcha. La jefa de gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, ha anunciado que la reapertura está prevista para el 28 de marzo de 2026, marcando el regreso del emblemático coloso mundialista tras un profundo proceso de renovación.
Los resultados de estas obras se empiezan a vislumbrar en diversas zonas críticas del estadio, especialmente en las áreas de vestidores y palcos. Las estructuras que ocuparán estos espacios están tomando forma con rapidez, gracias al avance en el colado del segundo nivel y la reubicación de pantallas que optimizarán las visiones desde las gradas altas. Además, se están erigiendo nuevas zonas de “hospitality”, elevando así la calidad de estancia para los asistentes.
La identidad del estadio también está en proceso de transformación. Durante el Mundial, se conocerá oficialmente como Estadio Ciudad de México, adoptando una imagen neutral acorde a los lineamientos de la FIFA. Tras el certamen, su denominación comercial se convertirá en Estadio Banorte, gracias al patrocinio que aporta una inversión clave de más de 2,100 millones de pesos (aproximadamente 106 millones de dólares) para financiar las mejoras estructurales.
El compromiso es claro: conservar la esencia monumental del Azteca mientras se le dota de modernidad, seguridad y funcionalidad para las próximas décadas. La jefa de gobierno lo resaltó al aseverar que la Ciudad de México se prepara para ser la sede más esplendorosa entre todas las sedes mundialistas.