La entidad caribeña se encuentra de luto tras la partida de Jesús Martínez Ross, quien pasará a la historia como el primer gobernador constitucional de Quintana Roo. El político chetumaleño falleció a los 91 años de edad y fue despedido con una emotiva ceremonia en el Congreso del Estado, espacio donde se rindieron honores frente al mural que narra la historia de la joven entidad.
En el acto solemne participaron la gobernadora Mara Lezama, representantes de los tres poderes del Estado, así como familiares, amigos y ciudadanos que quisieron mostrar su respeto al hombre que marcó el rumbo de Quintana Roo en su etapa inicial como Estado Libre y Soberano.
Un líder en tiempos de transformación
El compositor del Himno de Quintana Roo, Marco Ramírez Canul, resaltó durante el homenaje que a Martínez Ross le correspondió guiar los primeros pasos de un territorio recién transformado en entidad federativa. “Su virtud más grande fue la tenacidad, ese mismo espíritu que transmite nuestro himno y que él representaba en vida”, expresó.
Su administración, que abarcó de 1975 a 1981, dejó un legado institucional y político que sigue vigente. Entre sus aportaciones más recordadas destacan la fundación del Instituto Tecnológico de Chetumal, la creación de la Secretaría de Turismo, la instalación del Congreso local y la organización de los primeros ayuntamientos constitucionales. Asimismo, durante su mandato se sentaron las bases de la vida democrática del estado y se impulsó el naciente proyecto turístico de Cancún, respaldado por FONATUR, mientras Chetumal mantenía su papel como ciudad fronteriza.
De Payo Obispo a la historia política de Quintana Roo
Nacido en Payo Obispo —nombre original de la actual capital, Chetumal—, Jesús Martínez Ross no solo fue testigo de la transformación de Quintana Roo en Estado, sino que también se convirtió en protagonista de este proceso histórico. Su voz y sus decisiones contribuyeron a que la entidad dejara de ser considerada una región periférica y lograra consolidarse con identidad propia dentro de la federación mexicana.
En abril de 2025, meses antes de su fallecimiento, la Sociedad Andrés Quintana Roo difundió una videoentrevista en la que el propio Martínez Ross compartió recuerdos de su trayectoria: desde sus años como líder estudiantil, pasando por su papel como Oficial Mayor en el gobierno de David Gustavo, diputado federal y, finalmente, primer gobernador electo. Con orgullo, afirmó: “Fui el primer gobernador electo; después de eso no puede haber algo mejor”.
Enseñanzas, disciplina y vida política
Durante esa misma entrevista, también reveló algunos de los consejos que lo acompañaron en su camino político, enseñanzas que resumían la disciplina con la que enfrentó los retos de su tiempo: “No te emborraches, no andes con mujeres, no vayas a la iglesia. Cuídate porque del plato a la boca se cae la sopa. Fui disciplinado”.
Reconoció, además, que su gobierno contó con colaboradores importantes, entre ellos Pedro Joaquín Coldwell, y recordó las condiciones de precariedad que existían en ese entonces: comunidades enteras sin servicios básicos, familias que bebían agua de pozo y un Estado con un presupuesto limitado que obligaba a buscar soluciones creativas para atender las necesidades sociales.
Alicia Márquez, su compañera de vida y trabajo social
A lo largo de su carrera política, Martínez Ross contó con el apoyo incondicional de su esposa, Alicia Márquez, quien se distinguió por su labor social al frente del Instituto Mexicano de Protección a la Infancia, antecedente del actual DIF. Con ingenio y compromiso, doña Alicia organizaba kermeses y desayunos comunitarios para recaudar fondos cuando el presupuesto estatal no alcanzaba, lo que permitió financiar proyectos esenciales como la construcción de fosas sépticas en comunidades marginadas.
La pareja formó una familia con seis hijos y enfrentó los desafíos de la vida pública y privada con el mismo temple. En más de una ocasión, Alicia Márquez expresaba entre lágrimas la preocupación por la llegada de un nuevo hijo, a lo que su esposo respondía con serenidad: “¡Resignarte, mujer!”, frase que reflejaba la entereza con la que ambos enfrentaron las dificultades.
Un legado que trasciende generaciones
Hoy, Quintana Roo despide con honores a Jesús Martínez Ross, figura clave en la construcción del Estado moderno. Su labor no solo se refleja en las instituciones que fundó, sino también en la memoria colectiva de los quintanarroenses, que lo consideran el padre político de la entidad.
La huella de su trabajo permanece en la vida democrática, en el desarrollo educativo y en el impulso turístico que transformó a Quintana Roo en un referente a nivel nacional e internacional. Con su partida, queda el recuerdo de un hombre que asumió la responsabilidad histórica de dar identidad y rumbo a un Estado en pleno nacimiento.
https://x.com/VerasNews/status/1967711934351884700?t=LukopxYtWRDdfOCeQYFz6w&s=08
