El próximo viernes 10 de enero marcará el inicio del programa “Sí al desarme, sí a la paz”, anunciado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. La ceremonia se llevará a cabo en la Basílica de Guadalupe, como parte de las iniciativas para fomentar la paz y reducir la violencia en México.
“Este viernes realizaremos el acto de inicio del programa ‘Sí al desarme, sí a la paz’ en la Basílica de Guadalupe”, expresó Sheinbaum durante su intervención en la conferencia matutina desde Palacio Nacional.
Propósitos de este programa
Con lineamientos establecidos por la Secretaría de Gobernación (Segob) y publicados en el Diario Oficial de la Federación (DOF), el programa busca combatir delitos relacionados con armas de fuego. Su objetivo principal es prevenir lesiones, muertes accidentales, homicidios y feminicidios, además de otras formas de violencia derivadas de la posesión o uso de armas.
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La campaña promueve valores y conductas que desincentiven el uso de armas de fuego. También se enfoca en concientizar a la población sobre los riesgos y consecuencias de almacenar o manipular armas, municiones o explosivos en el hogar.
Se espera que esta iniciativa genere un impacto significativo en la prevención de delitos y en la construcción de una cultura de paz. Además, se busca sensibilizar a la ciudadanía sobre la importancia de resolver conflictos sin recurrir a la violencia, fomentando un ambiente de seguridad y armonía social.
Participación ciudadana y alcance nacional
El evento inaugural en la Basílica de Guadalupe representa un llamado a la unidad y a la colaboración de la sociedad. Las autoridades invitan a los ciudadanos a entregar armas de manera voluntaria, garantizando el anonimato y sin repercusiones legales.
El programa forma parte de un esfuerzo conjunto entre los gobiernos federal y local para promover la convivencia pacífica. Tras su arranque, se prevé que el mensaje del desarme y la reconciliación se extienda a distintas comunidades del país, fortaleciendo la lucha contra la violencia.
“Sí al desarme, sí a la paz” busca transformar la relación de los ciudadanos con las armas, promoviendo soluciones pacíficas y reduciendo los índices de violencia. Este esfuerzo subraya la importancia de aplicar medidas efectivas para construir una sociedad más armónica y libre de violencia.
