Orel Morales no busca ser un “referente”, pero al convertirse en el primer policía abiertamente trans en la Ciudad de México ha comenzado a romper esquemas en una institución históricamente masculinizada. Su historia está abriendo paso para que más personas de la comunidad LGBTI+ puedan ser quienes son, incluso en entornos tradicionalmente conservadores como las fuerzas del orden.
“No me quiero ver como un referente porque no me siento un referente, pero si en algún momento mi historia les inspira a decir ‘sí puedo, si él pudo, yo puedo’, que lo tomen”, expresó en entrevista con EFE en el marco del Día del Orgullo. Morales forma parte de la Policía Bancaria Industrial (PBI) desde hace siete años y comenzó su proceso de reafirmación de género en 2023, con el respaldo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).
Primer policía trans y puente para abrir espacios
Reconoce que ser el primer caso visible no fue sencillo, pero destaca el acompañamiento institucional. “No sé cómo se hace, pero te lo voy a investigar”, recuerda que le dijeron en su unidad. Para Orel, ese gesto fue clave: “Espero que sí haya un antes y un después de que la gente conozca mi historia”.
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A través de su visibilidad, espera animar a más personas trans a buscar empleo en espacios públicos como la Policía, Bomberos o servicios de emergencia, y demuestra que la identidad de género no debe ser una barrera para el profesionalismo o la empatía.
@imagennoticias Orel es el primer hombre trans en formar parte de la Policía Bancaria e Industrial de la CDMX. A pesar de que ha enfrentado la discriminación más de una vez, hoy ayuda a la ciudad con orgullo, amor y siendo fiel a quien es. Esta es su historia: NoticiasConNachoLozano ImagenNoticias con @Nacho Lozano
Más allá del uniforme de policía
Morales también forma parte de colectivos como ‘Chixs Rollers Trans’, con quienes celebrará la diversidad en la primera rodada ‘Pride Roller Day’. Para él, estas actividades son formas de convivir y alzar la voz fuera del uniforme: “Es una fecha que me gusta pasar con mis amigos, para ir a divertirnos, para marchar, para gritar consignas (…) siendo yo mismo”.
A pesar de los avances, Orel admite que aún hay mucho camino por recorrer en la formación de una policía incluyente. No obstante, celebra que existan capacitaciones y protocolos para atender mejor a grupos vulnerables, especialmente frente a crímenes de odio y transfeminicidios.
“Somos una policía que se educa”, concluye con esperanza.
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