La celebración del Día de Muertos en México, llena de arte y simbolismo, continúa maravillando tanto a locales como a turistas cada año. En esta ocasión, en la ciudad de Celaya, Guanajuato, una singular interpretación de esta tradición ha capturado la atención: Noa, una perrita de raza xoloitzcuintle, fue pintada de manera artística para convertirse en una figura similar a un alebrije, evocando a Dante, el famoso perro espiritual de la película Coco de Disney y Pixar.
La encargada de esta caracterización fue la artista local Danichenka Llanito, quien compartió la historia en su cuenta de TikTok, logrando que la narrativa de Noa se viralizara rápidamente. La inspiración para esta creación surgió cuando Bachmann Pedro, el dueño de Noa, contactó a Danichenka con la idea de que su perrita fuera transformada en un homenaje a Dante, el personaje que guía al protagonista de Coco en su travesía por el mundo de los muertos.
Danichenka describió cómo inició el proyecto: “El papá de Noa me pidió que la pintara como un alebrije, similar a Dante de Coco, y me emocioné mucho porque nunca había trabajado en algo parecido”, relató en su publicación en TikTok. Para llevar a cabo esta transformación, la artista se inspiró en los vibrantes colores y formas de los alebrijes, figuras míticas y llenas de color que, en la cultura mexicana, simbolizan a los seres que guían las almas en su viaje hacia el Mictlán, el inframundo en la cosmovisión mesoamericana.
Cada detalle fue minuciosamente cuidado, incluyendo el diseño de flores de cempasúchil que adornaban el lomo de Noa, representando el camino espiritual de los difuntos hacia el más allá. “Me encantó poner flores de cempasúchil porque son esenciales en el trayecto hacia el Mictlán, y me parecía que le daría un toque muy especial”, compartió Danichenka. Su objetivo fue asegurar que la transformación de Noa fuera no solo visualmente impactante, sino también segura para su salud.
El proceso de caracterización de Noa incluyó una prueba de pintura previa para verificar que los materiales fueran adecuados y no causaran ninguna reacción en la piel de la perrita. Danichenka explicó que utilizó una pintura a base de agua, creada con pigmentos naturales, lo que aseguró que el color pudiera ser removido fácilmente y sin efectos adversos para Noa. “Quería que el proceso fuera completamente seguro, y con estas pinturas sin químicos, me aseguré de que Noa estuviera cómoda y sin riesgo”, aclaró.
Finalmente, el día del evento, Noa se convirtió en el centro de atención en el jardín principal de Celaya, atrayendo la mirada asombrada de los visitantes y locales que presenciaron el resultado final de esta creativa intervención artística. Danichenka expresó su alegría y satisfacción con el proyecto, comentando: “Fue una experiencia realmente encantadora y significativa; sin duda, lo volvería a hacer”. La transformación de Noa en un alebrije viviente no solo reflejó la creatividad de la artista, sino que también rindió homenaje a una de las tradiciones más queridas de México, fusionando cultura, arte y amor hacia los animales.