La edición 2025 de los MTV Video Music Awards convirtió a Nueva York en capital del pop por una noche. La gala, celebrada en la UBS Arena, reunió estrenos de sencillos, shows de alto voltaje y una cosecha de premios que reconfigura el tablero del streaming de cara al cierre del año.
El reconocimiento a Artista del Año recayó en Lady Gaga, quien además obtuvo Mejor Colaboración por su tema junto a Bruno Mars. La intérprete firmó una de las puestas más comentadas de la noche, con un despliegue visual que llevó su marca escénica al terreno de la inmersión total.
Ariana Grande se quedó con el codiciado Video del Año y sumó Mejor Video Pop y Mejor Video de Formato Largo. Su propuesta apostó por narrativa cinematográfica, guiños retrofuturistas y un trabajo de dirección que subrayó su evolución de estrella adolescente a arquitecta de conceptos.
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La Canción del Año fue para Rosé, de BLACKPINK, junto a Bruno Mars por “APT.”, un triunfo que consolida el alcance global del K-pop y que, en clave simbólica, cruza dos industrias que hoy dialogan sin fronteras: la del idol y la del soul pop estadounidense.
Sabrina Carpenter se confirmó como figura central del pop con el premio a Mejor Álbum por Short n’ Sweet, además de sumar una distinción por los efectos visuales de “Manchild”. Su medley final, tejido como un pequeño relato de ascenso y ruptura, funcionó como tarjeta de presentación de era.
El apartado de talento emergente celebró a Alex Warren como Mejor Artista Nuevo, con un agradecimiento que subrayó el rol de los creadores y la cultura de los clips verticales. En la lógica del hit estacional, Tate McRae se llevó la Canción del Verano con “Just Keep Watching”, omnipresente en playlists y radios.
Los homenajes a la trayectoria tuvieron nombres propios de peso: Mariah Carey recibió el Video Vanguard Award por su legado audiovisual; Ricky Martin fue distinguido con el Latin Icon Award por abrir rutas a la música latina en mercados masivos; y Busta Rhymes obtuvo el Rock the Bells Visionary Award por su aportación al hip hop.
Los premios por género dibujaron un ecosistema diverso. El K-pop confirmó su músculo con una victoria de alto perfil, el alternativo premió la experimentación, el country ratificó su renacimiento mainstream y R&B y hip hop mantuvieron el pulso con proyectos de fuerte identidad autoral.
Más allá de la lista, la noche dejó una sensación común: el videoclip ya compite, por forma y ambición, con el lenguaje del cine. La edición 2025 elevó la vara para directores, fotógrafos y equipos de VFX, recordando que hoy un hit necesita un relato visual que lo potencie y lo explique.
Con un ritmo televisivo ágil y un equilibrio entre nostalgia y descubrimiento, MTV ordenó el mapa del pop global del año. El veredicto apunta a colaboraciones transfronterizas, reinas consagradas que siguen renovándose y una nueva generación que entiende el clip como territorio de autor.
Los MTV VMAs 2025 consolidaron el estatus de Lady Gaga como figura dominante del pop contemporáneo, mientras que Ariana Grande y Rosé también se destacaron con triunfos significativos. La noche también celebró íconos consolidados como Mariah Carey y Ricky Martin, confirmó nuevos talentos como Alex Warren, y reconoció la diversidad de sonidos y visiones emergentes.
Presentaciones memorables
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El show tuvo actuaciones memorables de Doja Cat, Post Malone, Sabrina Carpenter, J Balvin, Tate McRae, entre otros, y un emotivo tributo a Ozzy Osbourne a cargo de Steven Tyler, Yungblud y más
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Con información de INFOBAE
