Porque la vida es lo más importante hoy hablaré de la Mariposa Monarca.
Con recorridos de aproximadamente 4.000 kilómetros de ida y otros 4.000 km de regreso, la mariposa monarca Danaus plexippus llega desde Canadá a los bosques de oyamel México a invernar, realizando una de las migraciones más largas y abundantes de insectos. Es una mariposa grande y fácilmente reconocible, de 10 cm promedio y de alas de color ananaranjado con líneas negras
El ciclo de vida inicia con un huevecillo que mide de 1 a 2 mm y dura de 3 a 8 días. De estos huevecillos surge una larva que se alimenta de los restos de su huevo y de las plantas asclepias donde fue depositado, posteriormente se convierte en una oruga robusta con el patrón rayado característico. La oruga, pasa por cinco etapas antes de convertirse en pupa. De esta pupa finalmente después de metamorfosearse emerge una mariposa coloreada en negro y naranja
Lo más interesante de esta especie es que las mariposas nacidas a finales de verano y principios de otoño en norte américa componen una generación especial, llamada generación “matusalén”, que posee una gran resistencia y longevidad de hasta nueve meses, mientras que otras generaciones pueden vivir no más 24 días, y es justamente la generación “Matusalen” la que realiza un ciclo completo de migración (ida y vuelta) desde Canadá hasta México siguiendo la ruta trazada por generaciones anteriores.
Lamentablemente en México, el área ocupada por las colonias ha ido disminuyendo paulatinamente de 6 hectáreas en los años 90, a 2 actualmente, las principales causas de esta pérdida son el deterioro del hábitat debido a su transformación en áreas de cultivo y a la tala ilegal.
Dedico esta colaboración a Homero Gómez González. Compañero incansable defensor de la mariposa monarca, activista y comunicador comprometido con la conservación de los bosques, y encontrado muerto la semana pasada después de 13 días de desaparición.
Ahora sus alas volarán por la eternidad y regresarán cada año a los bosques que amo y protegió
