El pasado miércoles 30 de abril, la Plaza de la Constitución de la Ciudad de México se transformó en un espacio de encuentro cultural al aire libre, al albergar la clausura del festival “El Zócalito de las Infancias”. El evento culminó con la proyección de la aclamada película animada “Flow”, ganadora del Oscar, y contó con la presencia de su director, el letón Gints Zilbalodis, así como de la jefa de Gobierno capitalina, Clara Brugada.
Ante una multitud de aproximadamente 15 mil personas, entre niños, adolescentes y adultos, Brugada dio la bienvenida a Zilbalodis, destacando la importancia de su obra y el impacto que ha tenido en el público mexicano. “Cerramos con broche de oro, con este gran cine comunitario. Para ver una hermosa película, ‘Flow’. Y aquí está su director, Gints Zilbalodis, un joven director que viene de un país lejano, Letonia. Y le decimos que aquí estamos más de 15 mil personas y nos encanta que nos acompañe para ver su hermosa película. En México más de 2 millones de personas han visto su película y les ha llegado al corazón”, expresó la mandataria.
Como muestra de aprecio y reconocimiento, Brugada entregó a Zilbalodis un obsequio especial: una figura de un gato elaborada con arte huichol, simbolizando la conexión entre la cultura mexicana y la historia de “Flow”.
Visiblemente emocionado, Zilbalodis agradeció la cálida recepción y compartió su entusiasmo por estar presente en un lugar tan significativo. “Hola México, es increíble estar aquí. Son los mejores fans de Flow en el mundo. Flow es una película sobre un gato, pero es muy inteligente, es una historia muy personal para mí. La realizamos con un equipo muy pequeño y estar en este escenario frente a toda esta gente es increíble”, manifestó el director.
Además, expresó su optimismo sobre el futuro del cine y alentó a los asistentes a seguir sus pasiones creativas. “Creo que son tiempos muy emocionantes, estoy seguro que veremos asombrosas películas de personas aquí en la audiencia. Van a haber filmes realizados por ustedes que se proyectarán aquí y en todo el mundo”, afirmó.
La proyección de “Flow” en el Zócalo no solo representó un cierre memorable para el festival, sino también un testimonio del poder del cine para unir a las personas y trascender fronteras culturales. La emotiva respuesta del público y el reconocimiento a Zilbalodis reflejan el profundo impacto que una historia bien contada puede tener en audiencias de todo el mundo.