En la actualidad, existen muchos servicios novedosos con distintas temáticas que se pueden rentar y contratar, pero la idea de conseguir a un amigo por 15 euros es algo realmente fuera de lo común.
Debucari, una empresa japonesa cuyo nombre proviene de las palabras “debu” (que significa “gordo”) y “kariru” (que es “alquiler”), se dedica precisamente a alquilar personas denominadas gordas.
¿Por qué en Japón rentan amigos gordos?
Este nuevo servicio plantea la pregunta de quiénes alquilarían a una persona con sobrepeso. Es crucial aclarar que Debucari no ofrece servicios románticos ni de naturaleza sexual.
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Sorprendentemente, la idea fue un éxito y alrededor de 45 personas se inscribieron a la convocatoria. El servicio permite contratar falsos amigos o personas para hacer compañía y otros fines variados.
Debucari, aparentemente única en el mundo, busca cambiar la imagen negativa que se asocia con las personas con sobrepeso. Sus servicios están dirigidos principalmente a empresas que necesitan modelos de talla grande para sesiones de fotos, filmaciones de películas o programas de televisión. Sin embargo, no solo las empresas pueden beneficiarse de los servicios de Debucari; cualquier persona puede contratarlos.
La empresa indica que sus servicios pueden ser utilizados para diversos propósitos, como ayudar a comer platillos de gran volumen en un restaurante, elegir un regalo para alguien de talla grande, jugar al sube y baja, o hacer cosplay de un personaje voluminoso. Además, Debucari recomienda alquilar personas con sobrepeso para tomarse una fotografía y verse más delgado, recibir consejos de ellos, o simplemente para uso comercial. Los interesados deben pagar 2 mil yenes, aproximadamente 250 pesos mexicanos.
El sobre peso en Japón
En Japón, las personas con sobrepeso no son comunes, lo que llevó a Mr. Bliss, el empresario detrás de Debucari, a crear este negocio debido a la dificultad de contratar personas de tallas grandes para su marca de ropa.
Bliss fundó una agencia de talentos que se enfoca en personas con sobrepeso para diversos fines. En la página web de Debucari, se presenta a las personas en una especie de catálogo donde se puede ver su nombre, edad y foto.
En su campaña, Debucari explica que el término “grasa” no es despectivo. Las personas de tallas grandes en los servicios ofrecidos deben considerarse poderosas y no sentirse insultadas si son llamadas gordas.
Para ingresar al catálogo, se necesitan algunos requisitos, como tener mínimo 18 años y pesar más de 100 kilogramos. El sueldo de las personas que trabajan aquí es para el trabajador, y solo se deducirá una comisión previamente negociada.
Así, Debucari no solo ofrece un servicio innovador, sino que también promueve una visión más inclusiva y positiva de las personas con sobrepeso, desafiando los estereotipos y brindando nuevas oportunidades laborales en un mercado donde su presencia es escasa.
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