La séptima jornada de la Champions League fue testigo de un partido inolvidable entre el FC Barcelona y el Benfica.
En los primeros minutos de la segunda mitad, con el marcador igualado y el equipo culé buscando desesperadamente un gol, un error insólito del portero del Benfica, Anatoliy Trubin, cambió el rumbo del partido.
El gol histórico de Raphina
Intentando realizar un pase desde su área, Trubin envió el balón directamente a la cabeza de Raphinha. El rebote inesperado terminó dentro de la portería, poniendo al Barcelona 3-2 arriba.
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Lejos de celebrar, Raphinha optó por la prudencia, consciente de la fortuna que rodeó su gol. Mientras tanto, Trubin mostró su frustración con gestos que evidenciaban su descontento.
La ventaja culé no duró mucho. Apenas cuatro minutos después, Ronald Araujo protagonizó una jugada desafortunada. En su intento por despejar un balón que Szczesny se disponía a atrapar, el defensor uruguayo envió el esférico a su propia portería. El 3-3 devolvía la tensión al encuentro, mientras ambos equipos se esforzaban por retomar el control.
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Un final electrizante bajo la lluvia de Lisboa
La recta final fue un verdadero espectáculo de emociones. Primero, Robert Lewandowski descontó desde el punto de penalti, renovando las esperanzas del Barcelona. Luego, Eric Garcia igualó el marcador con un cabezazo impecable, llevando la tensión al límite.
Pero el momento cumbre del partido llegó en los últimos minutos. Un centro al área culé desató un caótico intercambio de cabezazos y un despeje final. Ferran Torres tomó el balón y, con una asistencia magistral, habilitó a Raphinha. El brasileño avanzó a toda velocidad, superó a Álvaro Carreras con un regate y definió de zurda para sellar el 4-5 definitivo.
Con este dramático triunfo, el Barcelona aseguró su sexto triunfo en la Champions League esta temporada. Raphinha, gracias a su inesperado doblete, se erigió como el héroe de un encuentro que quedará para la historia.
