Porque la vida es lo más importante, hoy hablaré del acitrón.
Hace unos días, la mayoría de las personas, en México comimos la tradicional “Rosca de Reyes”; un rico pan de celebración, en cuya elaboración se solía usar un dulce llamado acitrón.
En esta ocasión hare un llamado a no consumir roscas de reyes ni ningún otro alimento que contenga acitrón. Éste es un dulce que se extrae del corazón de una biznaga llamada: “Biznaga burra, gigante o de barril”.
Su nombre científico es: Echinocactus platyacanthus y es una guapísima cactácea de cuerpo globoso verde amarillenta, maciza, de lento crecimiento.
Una biznaga de barril de 3 metros de alto puede tener 100 años o más de edad.
Las biznagas frenan la erosión, retienen suelo, sus raíces almacenan agua, que es utilizada por otras formas de vida en el desierto.
Sus flores son alimento de muchos polinizadores.
En México, sus poblaciones se ubican en el desierto y están disminuyendo drásticamente. Por ello esta planta se encuentra protegida por la NOM-059-SEMAR-NAT-2010 en la categoría de protección especial.
Se encuentra en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), que alerta sobre la pérdida de especies relacionadas con la fuente de alimentos, medicinas y agua potable.
El artículo 420 del Código Penal Federal establece penas desde uno hasta nueve años de prisión y una multa de hasta 260 mil 640 pesos a quien extraiga flora o fauna silvestres, terrestres o acuáticas en veda, endémicas, amenazadas o en peligro de extinción, como es el caso de esta biznaga.