En una industria donde los titulares suelen girar en torno a premios, polémicas o alfombras rojas, la noticia de que Jesse Eisenberg, actor nominado al Óscar por Red Social, donará un riñón a una persona que no conoce ha conmovido al mundo. El intérprete, conocido por su perfil discreto y su inteligencia aguda, decidió dar un paso más allá de los reflectores para realizar un acto de auténtica humanidad.
De acuerdo con una entrevista concedida al medio The Atlantic, Eisenberg explicó que tomó la decisión tras participar en un programa médico de donación altruista, donde los voluntarios donan órganos de manera anónima para pacientes en lista de espera. “Siempre he sentido que si tienes la posibilidad de ayudar a alguien a seguir viviendo, no deberías pensarlo demasiado. No es heroísmo, es empatía en acción”, declaró.
El actor de 41 años se sometió a exámenes médicos exhaustivos durante seis meses y fue aprobado como donante compatible. Según fuentes cercanas, la cirugía se llevará a cabo a finales de 2025 en el Mount Sinai Hospital de Nueva York, con un equipo especializado en trasplantes renales. “Estoy nervioso, claro, pero también agradecido. Saber que puedes cambiarle la vida a alguien sin recibir nada a cambio es una experiencia espiritual”, comentó Eisenberg.
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Los especialistas explican que el procedimiento tiene una tasa de éxito superior al 95%. El riñón será asignado a un paciente en lista de espera mediante un sistema anónimo que garantiza imparcialidad. “Eisenberg no sabrá quién recibe su órgano, ni la persona sabrá quién fue su donante. Es un acto de confianza en la humanidad”, explicó el doctor David Klassen, director médico de la United Network for Organ Sharing.
La decisión del actor ha abierto un debate en redes sociales y medios sobre el valor del altruismo en una era marcada por la superficialidad. Miles de usuarios elogiaron su gesto y destacaron la importancia de visibilizar la donación de órganos, un tema que sigue enfrentando tabúes. “Cuando alguien con fama internacional muestra este tipo de empatía, genera conciencia real”, escribió un usuario en X.
En Estados Unidos, más de 90,000 personas esperan actualmente un trasplante de riñón, y se estima que cada día mueren 17 pacientes sin haber recibido uno. “El gesto de Eisenberg puede inspirar una ola de donaciones voluntarias”, afirmó la doctora Lisa Greer, especialista en bioética. “No se trata de celebridad, sino de humanidad compartida.”
El actor, que se hizo famoso por interpretar a Mark Zuckerberg en The Social Network, siempre se ha mantenido alejado del ruido de Hollywood. Vive en Bloomington, Indiana, junto a su esposa, la actriz Anna Strout, y su hijo pequeño. Además de su carrera cinematográfica, Eisenberg dedica gran parte de su tiempo a proyectos teatrales y fundaciones de ayuda a refugiados.
“No me interesa ser recordado por las películas que hice, sino por lo que hice por los demás cuando pude hacerlo”, dijo en la entrevista. Tras la donación, planea participar en campañas de concientización sobre la donación de órganos, especialmente entre jóvenes.
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Con información de INFOBAE
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