Para iniciar el llamado Cenote Zací se encuentra a 159 kilómetros al oriente de la ciudad de Mérida tomando la carretera a Valladolid y Cancún.
Esto muy cerca del centro de la ciudad yucateca mencionada en la calle 36 y entre 39 y 37 del barrio de Santa Ana.
La leyenda cuenta que Zac-Nicte era una joven demasiado hermosa que tenía una larga cabellera de color negro, ella era parte de una familia muy importante que vivía junto al Cenote de Zaci, la cual tenían una abuela que era conocida como una hechicera y curandera.
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Esta familia no tenía una buena relación con la familia del cacique que gobernaba en el pueblo, los cuales tenían un hijo que era un príncipe llamado Hul-Kin. A pesar del odio que tenían entre sí las familias, estos dos jóvenes se amaron desde la primera vez que supieron de su existencia.
Leyenda del Cenote Zací
Mencionar que la rivalidad entre las familias hizo que los jóvenes se tuvieran que ver a escondidas pero todo cambió cuando el padre se dio cuenta y decidió mandar a a Hul-Kin a otro pueblo a casarse con otra joven.
Esto hizo entristecer mucho a Zac Nicte y orillo a su abuela la bruja a realizar todo tipo de rituales para que Hul-Kin regresara, pero no pudo ser posible su retorno.
Una noche anterior a la boda de Hul-Kin, Zac Nicte se arroja al cenote con una piedra atada a su cabello y muere ahogada. En el momento de la muerte de la joven, Hul-Kin sintió un dolor en el pecho que lo obligó a volver a Zaci, pero ya era muy tarde.
Luego de que se enteró de lo acontecido, Hul-Kin se arrojó también al cenote y murió de la misma forma.
Finalmente los sortilegios de la bruja habían obtenido una respuesta y Hul-Kin había regresado para permanecer siempre con Zac Nicte.