Desde que se anunció la remodelación de la Plaza Grande, en Mérida, a mediados del pasado abril, varias voces se han manifestado, principalmente en contra, argumentando que la remodelación no era necesaria o que se talaron varios árboles.
A esas críticas se suman ahora las que cuestionan las bancas de concreto que sustituirán a las de madera y herrería que estuvieron durante muchos años.
“El cambio de mobiliario se tiene que hacer con un criterio, no es con ocurrencia ni para ir a tono con algún ejemplo a seguir”.
Así lo señaló el doctor Marco Tulio Peraza Guzmán, jefe de la Unidad de Posgrado e Investigación de la Facultad de Arquitectura de la Uady.
El doctor Peraza fue uno de los primeros en levantar la voz, junto con el director de la Facultad, al darse a conocer la intervención de la Plaza Grande por parte del Gobierno del Estado.
Critican nuevo mobiliario para la Plaza Grande: “Debe haber consensos”
“Sí nos preocupa que el proyecto no haya sido suficientemente consensado. Cuando menos, la Facultad de Arquitectura no supo, no tuvo una invitación para participar en esta consulta si es que se llevó al cabo, lo cual no sabemos”.
Aclaró que la preocupación se debe a que la Plaza Grande es el espacio más importante de la Ciudad, desde el punto de vista simbólico.
“Es cierto que a lo largo del tiempo ha tenido diferentes intervenciones, de hecho, la Facultad de Arquitectura, en los años 70 tuvo precisamente una propuesta de peatonalización de toda la plaza principal”, dijo el doctor, tras lamentar que no se haya tomado en cuenta la opinión de especialistas o colegios.
Remozamiento de la Plaza Grande en Mérida: “Escandaloso y perturbador”
Érica Millet Corona, exsecretaria de Cultura al principio de la actual administración, escribió en sus redes sociales, junto a una foto de las nuevas bancas, que le parece “escandaloso y perturbador que alguien se sienta con el derecho de intervenir de una manera tan vulgar un espacio tan entrañable”.
“No perdió la oportunidad de escribir ‘aquí estuvo Vila’, nada más que no creo que ninguno de quienes hemos habitado esos espacios apreciemos de manera positiva su ego desparramado sobre el espacio público”, continuó la exfuncionaria.
En el mismo tenor se pronunció el ingeniero Alfonso González Fernández en su artículo “Ataque al patrimonio”, publicado el miércoles14 en este periódico:
“Resulta inadmisible el asedio que la Plaza Grande de Mérida esta sufriendo para destruir algo que, si bien necesita mantenimiento, jamás debió ser atacada con tal impunidad, incorporado elementos disruptivos y ajenos a la temporalidad del sitio y su contexto”.
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Falta de claridad en el proyecto de la Plaza Grande en Mérida
En su escrito, González Fernández, miembro del Consejo Mundial de Ingenieros Civiles, indicó que “es atroz continuar adivinando en qué consiste el proyecto a través de la aparición ‘casual’ de elementos que no corresponden al sitio y sus características…”.
Sobre el mobiliario, el doctor Marco Tulio Peraza, quien en su momento también cuestionó la colocación de una fuente en el podio central de la plaza y el retiro de algunos árboles, dijo que también debió hacerse un consenso.
“Yo creo que tiene que haber consensos. Hay muchas formas de modernizar, hay una manera particular que se llama modernización con integración, que tiene que ver con tomar elementos de la misma historia, de los mismos caracteres tipológicos que son característicos, y modernizarlos o hacer nuevas interpretaciones.
“Pero eso no quiere decir sustituirlos por otros completamente diferentes porque eso es, de alguna manera, una sustitución absoluta de los valores históricos que están presentes en ese mobiliario”.
Remodelación de la Plaza Grande debe respetar “formas estéticas del pasado”
Recalcó que esas decisiones deben tomarse a través de concursos o a través de diferentes consultas para que la sustitución de los elementos históricos que componen el paisaje de la plaza no sea abrupta o radical.
“Yo creo que hay formas de hacer diseño moderno con integración al paisaje histórico. Es un diseño respetuoso que debe de buscar y cuidar en la tipología del pasado, que son las formas estéticas del pasado que puedes modernizar, pero sin romper completamente con él”, dijo el doctor Peraza.