Televisa enfrenta uno de los momentos más cruciales en su historia, marcado por profundos cambios en sus estrategias corporativas y en las dinámicas de la industria televisiva.
Durante décadas, la empresa fue conocida por sus contratos de exclusividad, un modelo que otorgaba estabilidad a sus talentos y les garantizaba privilegios. Sin embargo, esta práctica parece estar llegando a su fin, generando controversia tanto dentro como fuera de la televisora.
Escándalo en Televisa
El reciente escándalo en torno a la sexta temporada de “¿Quién es la Máscara?” ha intensificado la atención sobre los cambios en Televisa.
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Según informó la revista TVyNovelas, la empresa habría iniciado una investigación contra Galilea Montijo y la publirrelacionista Danna Vázquez, acusándolas de filtrar información confidencial sobre los participantes del programa, lo que representaría una violación de los contratos de confidencialidad. Incluso se menciona la posibilidad de que la televisora de San Ángel emprenda acciones legales contra ambas.
El presentador Michelle Rubalcava, en su canal de YouTube, aportó una perspectiva distinta al afirmar que este conflicto podría estar relacionado con la eliminación de los contratos de exclusividad.
Rubalcava aseguró que Televisa tiene planeado terminar al menos 10 de estos contratos, incluyendo los de figuras destacadas como Galilea Montijo y Andrea Legarreta, conductoras del programa “Hoy”. Este movimiento estaría motivado por una crisis económica que ha llevado a la televisora a reducir costos de manera drástica.
Figuras afectadas en Televisa
El impacto de estas decisiones es significativo. Galilea Montijo, una de las caras más visibles de la televisora de San Ángel durante años, habría explorado oportunidades fuera del país.
Informes sugieren que Danna Vázquez negocó un contrato con Telemundo para que Montijo se trasladara a Miami, lo que generó una reacción inmediata en las oficinas de San Ángel. Fuentes internas aseguran que un alto ejecutivo de Televisa descubrió estas gestiones, lo que intensificó la tensión en la empresa.
En respuesta a esta crisis, Montijo decidió cortar lazos con Danna Vázquez y reafirmar su lealtad a la televisora de San Ángel, un movimiento que podría interpretarse como una estrategia para mantener su posición en la televisora.
Mientras tanto, otras estrellas como Sebastián Rulli y Angelique Boyer podrían también verse afectadas por la eliminación de los beneficios exclusivos que definieron su relación con la empresa.
Este panorama representa el principio del fin de una era para Televisa, obligada a adaptarse a los retos económicos y a una industria televisiva en constante transformación.
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