De acuerdo con un informe del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), el 50% de la energía consumida del sector servicios se realiza en edificios destinados a oficinas.
Esto implica un 40% de consumo energético a nivel mundial que comporta grandes emisiones contaminantes a nuestro entorno.
Para seguir cuidando el planeta desde la oficina, queremos daros unos consejos para lograr una eficiencia energética.
Un plan de ahorro de energía en una empresa trata de establecer una serie de medidas que conciencien a las personas para utilizar la energía de forma responsable.
Al igual que el reciclaje, el ahorro energético y de recursos, depende de nuestras acciones individuales. El objetivo principal es identificar en qué tareas y zonas de la empresa se gastan más energía y recursos.
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El consumo de energía es imprescindible para realizar nuestro trabajo diario. Lo importante es mantener ese consumo en niveles adecuados.
Realizar alguna de estas acciones nos ayudará a lograrlo:
1. Mantener apagadas las luces de los espacios de trabajo que no utilizamos.
2. Aprovechar al máximo la iluminación natural y prescindir de encender el interruptor.
3. Utilizar lámparas de bajo consumo para reducir el gasto de energía.
4. Mantener limpios los filtros de los sistemas de climatización. Así garantizamos que la salida de aire sea óptima.
5. Desconectar los equipos que no se usen (fotocopiadoras, impresoras, etcétera.)
Que nuestro edificio sea eficiente, energéticamente hablando, dependerá, en gran medida, del correcto uso que se haga de los sistemas de iluminación, climatización y de los equipos eléctricos de la oficina. Está en nuestra mano hacerlo posible.
Con estas pequeñas acciones cotidianas, cualquier oficina puede convertirse en un lugar sostenible.
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Con información de Endolla.com