Un reciente estudio de Harvard advierte que el cambio climático podría convertir la exposición al aire libre en una experiencia “aterradora” para las ciudades del mundo. El aumento de las temperaturas, provocado por el cambio climático, se prevé que afecte en mayor proporción a las ciudades para el año 2050, y esto podría tener un impacto significativo en la comodidad de las personas y en la economía.
Cambio climático afectará a las grandes ciudades
El aumento de las temperaturas globales no solo amenaza la salud de las personas, sino que también afecta la productividad de las sociedades, lo que hace que sea crucial repensar el diseño de las ciudades para afrontar estos desafíos.
El estudio señala que, actualmente, las ciudades ocupan solamente el 2 por ciento de la superficie terrestre mundial, pero albergan alrededor del 55 por ciento de la población del planeta. Se estima que para el año 2050, esta proporción aumentará al 80 por ciento, lo que hace que la planificación urbana sea de vital importancia.
TAL VEZ TE INTERESE: Estrés térmico y salud mental: El lado invisible del cambio climático
El cambio climático provocará un aumento en la temperatura de casi tres cuartas partes de las ciudades del mundo, similar al clima de las áreas cercanas a los trópicos. Además, se prevé que el 22 % de las ciudades experimentarán temperaturas que no existen en la actualidad.
Un desafío importante que enfrentan las ciudades es el fenómeno de la “isla de calor urbano”, causado principalmente por el desarrollo urbano y los cambios en las propiedades térmicas de la infraestructura. En algunas zonas urbanas, la temperatura del aire puede ser hasta 12 grados Celsius más alta que en áreas menos densamente pobladas, lo que tiene un impacto negativo en la comodidad de las personas.
Durante el Foro sobre el “Futuro de las Ciudades” en la Harvard Graduate School of Education, se discutió en detalle cómo el aumento de las temperaturas globales modificará la vida de las personas en distintos niveles económicos en todo el mundo.
Se destacó la importancia de abordar el impacto del calor extremo en las poblaciones más vulnerables, ya que las altas temperaturas afectan de manera desproporcionada a quienes tienen menos recursos.
Uno de los problemas económicos identificados fue la influencia de las altas temperaturas en la economía informal, como se mostró en un caso en Gujarat, India, donde un trabajador informal enfrentaba temperaturas significativamente más altas en su lugar de trabajo en la azotea en comparación con el entorno circundante.
Según los expertos, este problema no es de corto plazo, y se prevé que pronto se supere un aumento de 1.5 grados Celsius en las temperaturas preindustriales. Esto empeorará de manera exponencial y rápida, lo que hace que la recopilación de datos y la búsqueda de soluciones específicas sean cruciales.
Los expertos sugieren un mayor uso de sensores, incluyendo dispositivos portátiles para medir el impacto del calor en las personas, ya que los diferentes microclimas afectan a las personas de distintas formas en función de su ocupación y entorno.
El aumento constante de las temperaturas y su proyección a futuro plantean una amenaza seria para la salud y la economía de las poblaciones urbanas. Se estima que para 2050, alrededor de 1,600 millones de personas vivirán en condiciones de calor sostenido, lo que tendrá un impacto significativo en la salud física y mental, así como en la productividad de las ciudades.
En un ejemplo concreto, el área metropolitana de Miami ya enfrenta pérdidas de productividad anuales de alrededor de 10,000 millones de dólares debido a las altas temperaturas, según la Chief Heat Officer, Jane Gilbert.
TAL VEZ TE INTERESE: Aumentan casos de dengue en Quintana Roo por cambio climático
La necesidad de abordar este desafío climático y adaptar las ciudades para proteger la salud y la economía de sus habitantes se vuelve más urgente que nunca.