El histórico club Atlante, conocido como “los Potros de Hierro”, podría regresar a la Primera División (Liga MX) en el año 2026, y nuevamente disputar sus partidos en un estadio histórico. Según reportes, la directiva del Atlante habría concretado la compra de la franquicia de Mazatlán FC, en una operación valorada en aproximadamente 65 millones de dólares, lo que permitiría al equipo azulgrana ocupar ese lugar en el máximo circuito.
De acuerdo con fuentes vinculadas al club, una parte importante del plan es volver a jugar en la Ciudad de México, específicamente en el Estadio que alguna vez albergó a los Potros: el emblemático Estadio Azteca. No obstante, hay un matiz: para el momento de su retorno, ese estadio podría llamarse Estadio Banorte, debido a un patrocinio y remodelaciones previstas tras el Mundial.
El presidente del Atlante, Emilio Escalante, ha señalado que su “opción más cercana” para retorno es justamente el Azteca, una idea que emociona a la afición por su significado histórico. Además, Escalante comentó que el club planea construir un centro de alto rendimiento en la Ciudad de México, con canchas, dormitorios y un centro de video, para reforzar su estructura deportiva.
Por otra parte, la venta de Mazatlán no solo permitiría el regreso del Atlante a la Liga MX, sino que significaría el fin de la franquicia sinaloense. Se espera que la transacción se haga oficial una vez que finalice la Copa del Mundo de 2026, lo que encaja con el calendario de reapertura del estadio Azteca remodelado.
En términos históricos, este movimiento es muy significativo: Atlante no ha jugado en la Primera División desde su descenso en el Clausura 2014. Su regreso implicaría devolver a un club fundacional al máximo nivel del futbol mexicano, reactivar viejas rivalidades y fortalecer la afición en la capital.
En suma, el posible retorno del Atlante representa un nuevo capítulo en su trayectoria: regresarían al poder desde lo deportivo y simbólico: regresan a la Liga MX, regresan a su estadio histórico (aunque bajo un nuevo nombre comercial), y lo hacen con planes de crecimiento institucional que van más allá de la cancha. Si todo se confirma, el Apertura 2026 podría marcar el renacer de un grande del futbol mexicano.
