Un joven surcoreano, identificado como el señor A, está siendo investigado por presunto maltrato animal tras el hallazgo de varios cadáveres y mascotas en condiciones deplorables dentro de su vivienda en Wanju. Las autoridades locales encontraron los cuerpos de un perro y tres gatos dentro de bolsas de basura, además de otros seis animales desnutridos y deshidratados que lograron sobrevivir.
De acuerdo con reportes de medios como Yonhap News y SBS News, el joven de 20 años es acusado de adoptar perros y gatos a través de plataformas en línea para después abandonarlos o dejarlos morir lentamente. La policía de Wanju ya inició una investigación formal en su contra por violar la Ley de Protección Animal, y ha solicitado a la ciudadanía aportar información que ayude a fortalecer el caso.
¿Cómo operaba el joven maltratador?

La Asociación Nacional de Protección de Gatos Callejeros fue quien presentó la denuncia al notar un patrón en sus adopciones. Detectaron que el sospechoso había recogido animales en distintas ciudades como Daegu, Gwangju y Nonsan, bajo el pretexto de brindarles un hogar.
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Sin embargo, después de concretar las adopciones, desaparecía sin dar actualizaciones a los antiguos cuidadores, lo que levantó las alarmas.
Aunque el comercio de animales está restringido en Corea del Sur, las plataformas digitales y redes sociales siguen siendo un espacio donde se realizan transacciones o adopciones informales. El joven se presentaba como un “amante de los animales” con supuestos conocimientos veterinarios y buena situación económica, lo que facilitaba que la gente confiara en él.
Exigen justicia y mayor regulación
Al ingresar al departamento, los investigadores encontraron bolsas con restos de los animales fallecidos y varios sobrevivientes con signos de desnutrición. Aunque había comida en el lugar, las autoridades sospechan que los animales no eran alimentados adecuadamente. El caso ha causado gran indignación pública y reavivado el debate sobre la regulación en los procesos de adopción.

Usuarios en redes sociales exigieron penas más severas para los responsables de maltrato animal, señalando que este tipo de conductas deben castigarse con cárcel. “No puede llamarse humano quien adopta para matar”, escribió un internauta. Otros pidieron que Corea del Sur refuerce sus leyes para evitar que personas sin empatía o antecedentes de crueldad tengan acceso a mascotas.
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