Aunque las cifras recientes muestran que en México la tasa de desempleo ha registrado una disminución, la informalidad laboral continúa creciendo, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Durante marzo de 2025, el porcentaje de personas sin empleo fue menor en comparación con el año anterior; sin embargo, esta mejora no se ha reflejado en la creación de empleos formales.
El reporte destaca que una proporción considerable de mexicanos, aunque tienen algún tipo de ocupación, lo hacen en condiciones precarias, fuera de la seguridad social y de los beneficios laborales que otorgan los trabajos formales. De hecho, la tasa de informalidad laboral subió respecto al año anterior, evidenciando que gran parte del empleo que se genera en el país no garantiza estabilidad ni derechos laborales.
Especialistas señalan que esta tendencia indica una recuperación desigual del mercado laboral: si bien más personas están trabajando, muchos lo hacen en empleos informales, con ingresos bajos y sin protección legal. Este fenómeno podría tener consecuencias en el mediano y largo plazo, afectando el acceso a pensiones, servicios de salud y otros derechos fundamentales.
El INEGI subraya que sectores como el comercio y los servicios son los que más contribuyen a la informalidad, y advierte que para revertir esta situación sería necesario implementar políticas públicas enfocadas en promover la formalización de los empleos y ofrecer incentivos tanto a trabajadores como a empleadores.
En conclusión, aunque el desempleo disminuye en México, el crecimiento de la informalidad refleja retos profundos en la estructura laboral del país, que requieren atención urgente para lograr un mercado de trabajo más justo y sostenible.
