Un inesperado incidente ocurrió cuando una adolescente fue atacada por su mascota, un capibara, mientras jugaban juntos en un lago.
La escena quedó captada en el celular de la menor, mostrando cómo el animal, aparentemente dócil, se tornó agresivo tras ser regañado por la joven.
Joven fue atacada por un capibara
En el video, se observa a la adolescente llamándole la atención a su mascota mientras ambos están en el agua. Todo parecía normal hasta que el animal avanza hacia ella, provocando que la menor retroceda. De manera repentina, el Hydrochoerus hydrochaeris se lanza sobre la joven y comienza a morderla en los brazos y hombros.
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Entre gritos de desesperación, la adolescente pide ayuda a su padre, ya que no puede defenderse del ataque. Después de aproximadamente 30 segundos de agresión, el padre aparece en la escena con un bate para separar al animal de su hija.
Finalmente, el Hydrochoerus hydrochaeris se detiene y la menor logra salir del lago entre lágrimas, mostrando diversas lesiones en su cuerpo.
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Lesiones causadas por capibaras: raras pero graves
Aunque los ataques de capibaras, conocidos científicamente como Hydrochoerus hydrochaeris, son inusuales, pueden ser peligrosos debido a los grandes dientes incisivos de estos animales.
Las heridas pueden incluir cortes profundos, hematomas, desgarros de tejidos, lesiones en tendones o articulaciones, y en casos extremos, heridas que comprometen la vida de la víctima.
Pese a su tamaño y apariencia, los capibaras son generalmente considerados animales dóciles y amigables, tanto con los de su especie como con humanos y otros animales.
Durante los últimos años, han ganado popularidad en redes sociales debido a videos virales que muestran su comportamiento tranquilo y su interacción con otras especies, consolidándose como las nuevas “mascotas favoritas” de muchas personas.
Este incidente pone en evidencia los riesgos de tener animales silvestres como mascotas, incluso aquellos considerados inofensivos como los capibaras. Aunque son animales sociables en su hábitat natural, situaciones de estrés, miedo o malentendidos pueden desencadenar comportamientos agresivos.