Thomas Roland, doctor de la Universidad de Exeter, indicó recientemente se ha visto un deshielo rápido y además de que hay un gran aumento de vegetación.
“Este cambio no solo es rápido, sino extenso. Podríamos estar viendo los primeros signos de una alteración significativa en uno de los últimos rincones vírgenes del planeta”, declaración que refleja la incertidumbre por el hecho.
Y es que se ha visto en una imagen satelital que lo que anteriormente eran extensiones blancas y azules de hielo, ahora cada año muestran más manchas verdes.
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Con la descomposición de la materia vegetal y la generación de suelo en la Antártida, permitirá la llegada de otras platas y potenciales especies invasoras; situación que podría generar un alteración drástica a la biodiversidad local.
Preocupación por el aumento de vegetación en la Antártida
Y es que el que nuevas especies se establezcan en dicha zona, será complicado erradicarlos; por lo que podría poner en riesgo a los ecosistemas autóctonos.
Las superficies blancas de hielo y nieve reflejan la luz solar, mientras que la vegetación absorbe más energía. Este cambio podría acelerar el calentamiento local y global, un ciclo preocupante que agrava la situación.
“Estas observaciones nos permiten monitorear cómo y dónde cambia la cobertura de nieve”, comentó Roland. Esta evidencia irrefutable resalta el impacto del cambio climático en un área remota y vulnerable.
