El Museo Franz Mayer está experimentando una de sus etapas más concurridas y populares, con miles de personas ansiosas por conseguir un boleto que les permita disfrutar de la tan esperada exposición “Museo 31 Minutos”. Esta exhibición estará disponible en el museo hasta septiembre de 2024, lo que ha generado una gran expectativa entre el público. En este contexto, se ha dado a conocer la noticia de que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha dado luz verde para iniciar las obras de remodelación en el Claustro Mayor del museo Franz Mayer, así como en su piso inferior.
Las reformas incluyen la eliminación de losetas contemporáneas y la corrección de niveles y pendientes que no se alinean con la estructura original del edificio. Según lo explicado por el INAH, estas modificaciones permitirán la restitución de las piezas en buen estado de conservación y la adición de algunas nuevas de manera armoniosa, integrando lo antiguo con lo renovado de una manera que respete la esencia histórica del lugar.
Un aspecto destacado de este proyecto es la rehabilitación de los pisos en la planta baja del Claustro Mayor. Debido a la magnitud de esta obra, el museo se verá obligado a cerrar temporalmente, aunque aún no se han especificado ni la fecha exacta de inicio ni la duración estimada de los trabajos. Es importante recordar que en la remodelación de 2019, el proceso tomó más de un año, lo que sugiere que esta nueva intervención podría ser igualmente extensa.
Fue en julio de 2022 cuando el patronato del museo Franz Mayer solicitó al INAH la autorización para llevar a cabo importantes adecuaciones en el Claustro Mayor, una estructura construida en el siglo XVI que originalmente albergaba el Hospital de San Juan de Dios, y que desde 1931 ha sido reconocida como Monumento Histórico. La propuesta inicial del patronato requirió de ajustes significativos, con el fin de preservar la estructura y la integridad visual del edificio. Para respaldar esta intervención, se llevó a cabo una investigación histórica exhaustiva que asegurara la fidelidad y el respeto hacia el patrimonio del lugar.
Según informó el INAH, el proyecto inicial fue objeto de una revisión detallada para asegurar que no se alterara la estructura ni se comprometiera el patrimonio del Claustro Mayor. Posteriormente, en junio de 2023, se presentó un segundo proyecto, el cual fue evaluado exhaustivamente por el Consejo de Monumentos Históricos Inmuebles (CMHI). Tras esta evaluación, se autorizó la instalación de una cubierta retráctil en el edificio.
Esta misma semana, el CMHI del INAH dio su aprobación oficial al proyecto, el cual será cuidadosamente supervisado por especialistas para garantizar que se cumplan todas las condiciones establecidas en el permiso de obra. La cubierta retráctil será instalada sobre la azotea del Claustro Mayor, y deberá permanecer abierta el 93% del tiempo para evitar alteraciones en el microclima que podrían dañar el patrimonio del museo Franz Mayer. Esta estructura estará compuesta por una combinación de lona desmontable y franjas translúcidas y opacas, sostenidas por una ligera y transparente estructura de aluminio.
El comité responsable mencionó que se han tomado todas las precauciones necesarias para limitar el impacto visual de la nueva estructura, asegurando que no interfiera con la apreciación estética del edificio. Además de la cubierta retráctil, el proyecto incluye la mejora de la arquitectura del paisaje del patio central, manteniendo su carácter de jardín, una característica distintiva de los hospitales de la época en que se construyó el Claustro. Los estudios realizados garantizarán que las especies arbóreas existentes no se vean afectadas durante la remodelación.
El CMHI destacó que se conservará el arbolado actual, mientras que las jardineras no originales serán modificadas para plantar especies epífitas y árboles de porte medio, integrando la vegetación de manera que respete la historia del lugar. Asimismo, se aprobó la restauración de las columnas de cantera en ambos niveles del Claustro Mayor, junto con varios elementos de madera que serán rehabilitados.
Además, se realizará una renovación integral de las instalaciones hidráulicas y pluviales, mejorando la canalización de agua desde la azotea y asegurando la adecuada impermeabilización del edificio. También está previsto que se instale iluminación escénica en todo el Claustro y en la azotea, respetando las canalizaciones existentes para evitar perforaciones que podrían dañar la estructura histórica.
El comité de expertos enfatizó que la propuesta ha sido minuciosamente revisada para cumplir con la Carta de Taxco, una normativa que regula la iluminación de monumentos históricos. Durante todas las etapas de la obra, las actividades serán supervisadas por especialistas del INAH. Además, cualquier ajuste que sea necesario durante el proceso deberá ser documentado en una bitácora, y cualquier excavación que exceda los 0.6 centímetros requerirá la aprobación previa de la Dirección de Salvamento Arqueológico del INAH, según lo informado por el CMHI.