En estos días, nuestro país se encuentra inmerso en una ola de calor sin precedentes, y se prevé que la Ciudad de México alcance temperaturas superiores a los 33 grados en los próximos días. Ante esta situación, es crucial encontrar formas de mantenernos frescos sin incurrir en gastos excesivos en sistemas de refrigeración como aires acondicionados o ventiladores.
En este contexto, es oportuno recordar y aplicar consejos tradicionales que nos ayuden a sobrellevar este calor extremo sin deshidratarnos ni sufrir sus efectos negativos.
La aparición de esta ola de calor se debe a la consistente superación de los límites de temperaturas máximas durante varios días consecutivos, según la mayoría de los meteorólogos. Este fenómeno climático puede ser peligroso, ya que la exposición prolongada al sol sin protección puede provocar deshidratación, quemaduras, insolación e incluso golpes de calor.
Para contrarrestar estas condiciones extremas, es importante seguir estrategias para mantenernos frescos durante las próximas semanas, especialmente considerando que la ola de calor, como consecuencia del cambio climático, serán cada vez más intensas y frecuentes.
En este sentido, se han recopilado algunos consejos prácticos para sobrellevar este clima extremo sin depender constantemente de ventiladores o sistemas de refrigeración costosos.
¿Cómo refrescarse en esta ola de calor?
Una de las recomendaciones es mantener las ventanas cerradas durante el día para evitar el ingreso del calor, y abrirlas durante la noche para permitir que el aire fresco entre y refresque los espacios interiores.
Además, colocar toldos en las áreas exteriores expuestas al sol ayuda a crear sombras y mantener fresco el entorno.
En cuanto al descanso, enfriar las sábanas con bolsitas de agua fría antes de dormir puede contribuir a reducir la sensación de calor durante la noche. Además, es importante controlar la temperatura del agua al tomar una ducha, optando por agua tibia en lugar de caliente para evitar la activación del calor en el cuerpo.
Otra estrategia es llenar la casa con plantas que se adapten a la sombra, como ficus o helechos, ya que estas tienen la capacidad de refrescar el ambiente y purificar el aire.
Por último, elegir telas adecuadas para la ropa de cama y la vestimenta, como algodón y lino, ayuda a mantenernos frescos y cómodos durante el día, evitando telas sintéticas que retienen el calor.