El rey Tutankamón era apenas un adolescente cuando murió. Para un faraón del antiguo Egipto, presumiblemente bien alimentado y ferozmente protegido, esto era una muerte prematura. También fue crucial, pues su muerte significó el principio del fin de la dinastía XVIII del antiguo Egipto. ¿Cómo pudo pasar esto?
Los expertos han especulado sobre las posibles causas desde que el arqueólogo británico Howard Carterdescubrió la tumba de Tutankamón en el Valle de los Reyes en 1922. Sin embargo, un equipo británico habría resuelto el misterio. De acuerdo con informes de prensa del Reino Unido, el equipo trabajó con radiografías del rey Tut tomadas en 1968.
En el informe se incluye una imagen semejante a una tomografía computarizada, que es una radiografía tratada con tecnología de imágenes por ordenador. Esta revela la falta de esternón y las costillas están alineadas a lo largo de la columna vertebral, probablemente rotas y eliminadas por los embalsamadores.
Pero en 2005 se realizó un verdadero TAC bajo la dirección de Zahi Hawass, el entonces jefe del Consejo Superior de Antigüedades de Egipto. Las imágenes resultantes no se hicieron públicas, pero también revelaron un daño extremo en la caja torácica, así como una fractura en la pierna.
La momia del rey Tutankhamón estaba colocada dentro de tres ataúdes, uno anidadado dentro del siguiente en orden decreciente tamaño.
Este es el segundo ataúd.
Está hecho de madera dorada incrustada con piedras semipreciosas, faience egipcia y pasta de vidrio.
Esta exquisita obra (JE 60670), que tiene 204 centímetros de longitud, se encuentra ahora en el Museo de Antigüedades Egipcias, El Cairo, Egipto.