OnlyFans, la plataforma de venta de contenido erótico en línea, ha emergido como una alternativa económica para mujeres jóvenes en América Latina, especialmente durante la pandemia. El debate sobre si este tipo de actividad constituye prostitución ha surgido entre las jóvenes que ofrecen contenido explícito.
OnlyFans el trabajo de moda en las mujeres
Desde República Dominicana hasta Venezuela y México, miles de mujeres jóvenes venden fotos y vídeos eróticos en OnlyFans, donde los usuarios pagan suscripciones para acceder a este contenido, generando un intenso debate sobre el trabajo sexual en la era digital.
A través del hashtag #OnlyFans, estas jóvenes promocionan sus perfiles, ofreciendo desde imágenes sugerentes hasta contenido explícito una vez se ha pagado la suscripción. Georgia Rothe, analista de la ONG regional Asuntos del Sur, menciona cómo el acceso a internet se convirtió en la única opción de subsistencia para muchas mujeres durante la pandemia.
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A pesar de la oportunidad económica que representa, este tipo de trabajo ha generado controversia en torno a la prostitución y los límites éticos que implica.
Livia Motterle, académica del Centro de Investigaciones y Estudios de Género de la UNAM, aclara que cuando hay un intercambio sexual a cambio de dinero, se trata de trabajo sexual. Sin embargo, para algunas jóvenes, admitir esto implica enfrentar el estigma social asociado.
La llegada del Covid-19 y el confinamiento aumentaron masivamente la popularidad de OnlyFans. Esta plataforma, que originalmente albergaba una diversidad de creadores, se ha inundado principalmente con pornografía producida por mujeres, amplificando las desigualdades de género ya existentes en la región.
Laura Salgado, activista de Defensoras Digitales en México, cuestiona cómo la situación económica y de género lleva a las mujeres a elegir entre cuidarse del Covid-19 o combatir el hambre. Yunuel Castillo, abogada especializada en violencia digital, enfatiza la necesidad de capacitar a las chicas en seguridad digital para prevenir riesgos como la difusión no autorizada de sus imágenes.
Si bien para muchas mujeres ha representado una fuente de ingresos durante la crisis sanitaria, la plataforma también ha sido objeto de críticas por su estructura de comisiones. OnlyFans retiene el 20% de las ganancias de las creadoras, lo que ha llevado a algunas mujeres, como Leticia, a buscar alternativas de venta fuera de la plataforma.
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El debate sobre el trabajo sexual en línea y las dificultades económicas continúa, mientras mujeres como Leticia se adaptan, buscando asegurar su sustento en medio de una realidad compleja y desafiante.
