Un gigante mexicano de servicios de alimentación para comedores de gobierno, Corporativo Cosmos, junto con la empresa francesa Ÿnsect, estarán instalando en México una granja de insectos comestibles.
Buscan que se aproveche el boom mundial de las proteínas de los insectos y además esperan los productores mexicanos que se detone el mercado local.
Ÿnsect, establecida cerca de París e impulsada por el gobierno francés, decidió instalarse en México al ser el país de mayor consumo de insectos y la mayor variedad global de bichos.
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La ubicación de la granja de insectos se determinará a finales del año en curso y estará ofreciendo proximidad con Estados Unidos. Asegurando que será en el futuro el mayor mercado de dichos productos.
En una entrevista para MILENIO la bióloga Ivonne Márquez (cofundadora de OptiProt), dijo que viene con todo dicho proyecto.
Habrá granja de insectos en México
El gusano lo vende entero como botana enchilada o complemento nutricional y en polvo como ingrediente para licuados, galletas o croquetas.
La experta mencionada dijo que se espera que con su llegada se pueda ayudar al impulso de la industria de los insectos en nuestro país.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por su sigla en inglés), los insectos son parte de la dieta regular de 2 mil 500 millones de personas en el mundo. No así de los europeos.
Y es que de manera reciente se realizó un sondeo por parte de la Organización Europea de Consumidores, que arrojó que no más del 10% de los habitantes están dispuestos a intentar comer insectos enteros para sustituir el consumo de la carne.
La Unión Europea estableció políticas regionales estratégicas y de largo plazo para garantizar su seguridad alimentaria, reducir radicalmente la huella ambiental y los enormes costos en recursos naturales que genera el consumo de carne. La cría de insectos comestibles forma parte de ello.
Alimentación Humana y Animal (IPIFF, por las siglas en inglés) estima que en Europa la producción anual pasará de las 500 toneladas actuales a unas 260 mil toneladas de producción de insectos en 2030.
