La UFC enfrenta uno de los momentos más difíciles de su historia reciente con la confirmación de una noticia devastadora. Conor McGregor, el peleador más célebre en la historia de las artes marciales mixtas, quien estaba programado para hacer un esperado regreso al octágono el próximo 29 de junio, ha quedado fuera de su combate contra Michael Chandler, sumiendo a la organización en una gran incertidumbre.
Lo que durante la semana pasada se manejaba como un rumor se ha convertido en una realidad ineludible. La pelea entre Conor McGregor y Chandler, que estaba prevista para el evento UFC 303, ha sido aplazada. Diversas fuentes oficiales de la UFC habían comenzado a advertir sobre esta posibilidad. La primera señal fue la cancelación de una conferencia de prensa en Dublín el 3 de junio, lo que indicaba problemas inminentes. Los reportes iniciales apuntaban a una lesión de McGregor que le impediría recuperarse a tiempo, y estos informes fueron finalmente confirmados por Dana White. Se espera que la pelea sea reprogramada para finales de 2024.
Conor McGregor, quien debía regresar el 29 de junio en Las Vegas, Nevada, había estado fuera del octágono por casi tres años. Durante este tiempo, la UFC se convirtió en su plataforma para alcanzar el estatus de atleta mejor pagado del mundo, superando incluso a figuras como Messi y Ronaldo. Tras recuperarse de una grave lesión sufrida en su último enfrentamiento contra Dustin Poirier, ‘The Mac’ había planeado un regreso triunfal en el evento principal del UFC 303 contra Chandler, quien había esperado más de un año para esta oportunidad, consciente del impacto financiero que conlleva enfrentarse a Conor McGregor, el principal generador de ingresos para Dana White y la UFC.
Sin embargo, este enfrentamiento ha sido pospuesto hasta que White y su equipo de matchmaking logren fijar una nueva fecha. Se esperaba que el evento estableciera un récord de ventas, con ingresos que ya habían superado los 20 millones de dólares solo en entradas. Además, se habían vendido numerosos Pay Per Views (Pago por evento), comprados por fanáticos ansiosos por ver el regreso de McGregor. Ahora, la organización deberá resolver este caos en las próximas semanas. Sin McGregor, el UFC 303 ha cambiado por completo, aunque la UFC ha intentado mitigar el impacto sustituyendo el combate principal con otro enfrentamiento atractivo.
El nuevo combate estelar del UFC 303 contará con Alex Pereira, actual campeón del peso semipesado, enfrentándose a Jiří Procházka, ex campeón de la misma categoría. Aunque ninguno de los dos tiene el mismo poder de convocatoria que McGregor, la pelea promete ser emocionante, con ambos peleadores en excelente forma.
Pereira, un brasileño conocido por sus potentes puños, noqueó a Jamahal Hill en el evento principal del UFC 300 en abril pasado. Minutos antes, el samurái Procházka había vencido a Rakic también por KO. Estos dos luchadores ya se habían enfrentado el 12 de noviembre en el UFC 295, donde Pereira le arrebató el cinturón de las 205 libras a Procházka en un combate memorable.
Además, el coestelar originalmente programado para el UFC 303, Hill contra Carlos Ulberg, también ha sido cancelado. En su lugar, se enfrentarán Brian Ortega y Diego Lopes en la categoría del peso pluma, la misma categoría en la que Ilia Topuria es el actual campeón.
En resumen, la cancelación de la pelea de McGregor ha generado un gran impacto en la UFC, obligando a la organización a reconfigurar uno de sus eventos más esperados. Mientras tanto, los fanáticos deberán esperar hasta finales de año para ver a McGregor regresar al octágono, con la esperanza de que este retraso solo aumente la expectación y el drama alrededor de su eventual retorno.