La gran final de MasterChef Celebrity Generaciones 2025, transmitida el 27 de julio de 2025, coronó a Dani Valle como el ganador tras una competencia reñida contra Andrea Noli y Carlos Quirarte. El influencer jalisciense, representante de los Millennials, se llevó un premio de 1,160,000 pesos y un trofeo dorado conmemorativo por los 10 años del programa en México. Su victoria, lograda con un menú de tres tiempos que destacó por su técnica y narrativa personal, sorprendió a quienes apostaban por Quirarte como favorito, pero también generó críticas sobre el impacto de las filtraciones previas en la percepción del público.
Dani Valle, de 33 años, comenzó la temporada como un desconocido para muchos, conocido principalmente por sus videos humorísticos sobre la vida “godín”. Sin embargo, su evolución en la cocina fue notable, pasando de platillos básicos a propuestas sofisticadas. En la final, su menú titulado “El rompecabezas de Dani” reflejó experiencias personales: una entrada de callo de hacha con crema de elote tatemado, un mole blanco con langosta y un tiramisú de chongos zamoranos. Los jueces elogiaron la coherencia y el sabor, aunque algunos fans cuestionaron si su narrativa personal influyó más que la calidad culinaria.
TAL VEZ TE INTERESE: Perrito cuida a su dueño sin vida, tras ataque armado
El reto final consistió en preparar un menú de tres tiempos en 120 minutos, con la presión de crear platillos conceptuales y lógicos. Valle destacó desde la entrada, con su “Callito animador”, que evocaba sus días como animador en Playa del Carmen. Los chefs Zahie Téllez, Poncho Cadena y Adrián Herrera alabaron la frescura y la presentación, aunque señalaron que la salsa macha pudo haber sido más equilibrada. Este primer paso le dio ventaja frente a los tropiezos iniciales de Noli y Quirarte.
El plato fuerte de Valle, “Recuerdos de verano”, combinó langosta con un mole blanco y mantequilla de hoja santa, inspirado en un campamento en Maine y sabores mexicanos. Los jueces destacaron la audacia del mole, que evitó el dulzor típico, y la elegancia de la hoja santa, aunque algunos espectadores consideraron que el platillo era arriesgado para una final. Esta elección consolidó su posición, mostrando una madurez culinaria que superó las expectativas iniciales.
El postre, “Dulce gratitud”, un tiramisú de chongos zamoranos con caramelo, fue el cierre perfecto para Valle. Aunque los jueces temieron que fuera demasiado dulce, el equilibrio de sabores y la conexión con Michoacán conquistaron su paladar. En contraste, el postre de Quirarte, unas cocadas, fue criticado por parecer más un dulce que un postre, mientras que Noli falló en la ejecución por falta de tiempo. Este momento definió la victoria de Valle, según los analistas.
Andrea Noli, de la generación Casete, mostró consistencia con su entrada y plato fuerte, pero su postre, afectado por problemas de organización, no alcanzó el nivel esperado. Los jueces reconocieron su tenacidad, pero señalaron que su menú carecía de la narrativa emotiva de Valle. Algunos fans argumentaron que Noli merecía más reconocimiento por su trayectoria en la competencia, lo que generó debates sobre la imparcialidad del jurado.
Carlos Quirarte, otro Millennial y favorito de muchos, presentó un menú elegante, pero su plato fuerte, un conejo con salsa, fue criticado por la falta de cohesión entre los elementos. Su postre, aunque creativo, no cumplió las expectativas de un platillo final. Las filtraciones previas que lo señalaban como ganador generaron controversia, y algunos espectadores consideraron que la presión de estas expectativas pudo haber afectado su desempeño.
La final estuvo marcada por la presencia de familiares y exconcursantes, lo que añadió un toque emocional. Valle recibió apoyo de su hermana, mientras que Quirarte y Noli contaron con sus seres queridos. Sin embargo, algunos críticos señalaron que este formato distrajo a los finalistas, especialmente a Noli, quien enfrentó problemas de tiempo. La dinámica generacional, un sello de esta temporada, destacó la diversidad de estilos, pero también evidenció rivalidades internas.
La victoria de Valle no estuvo exenta de críticas. Algunos en redes sociales acusaron al programa de favorecer a los Millennials, mientras que otros celebraron su triunfo como una ruptura de estereotipos, destacando su identidad como creador de contenido abiertamente gay. El influencer agradeció la oportunidad y prometió compartir su preparación previa en redes, lo que podría inspirar a nuevos talentos. No obstante, el debate sobre los impuestos, que reducirán su premio a unos 700,000 pesos tras retenciones del SAT, generó críticas al sistema fiscal.
El triunfo de Dani Valle en MasterChef Celebrity Generaciones 2025 consolida su salto de las redes a la televisión, demostrando que la pasión y el esfuerzo pueden superar las expectativas. Su menú, una mezcla de técnica y emoción, marcó un hito en una temporada cargada de nostalgia y competencia. Sin embargo, el programa enfrenta el reto de mantener su relevancia en un contexto donde las filtraciones y la presión del público pueden opacar el talento en la cocina.
TAL VEZ TE INTERESE: Muere Kang Seo-ha, actriz de k-dramas, a los 31 años
Con información de INFOBAE
Deja un comentario Cancelar respuesta