La actriz Laura Vignatti ha dado a conocer detalles desgarradores sobre la violencia doméstica que sufrió a manos de su expareja, destacando la gravedad de la situación y el proceso legal que está enfrentando. En una conferencia de prensa junto a su abogada, reveló cómo fue víctima de maltrato físico y psicológico durante su relación.
Vignatti compartió que al inicio de la relación notó señales de alerta, pero decidió ignorarlas. Con el tiempo, experimentó violencia física, incluyendo estrangulamiento y fracturas, además de maltrato psicológico que la dejó sin hogar, trabajo ni recursos económicos.
Laura Vignatti narra los terribles hechos
“Me sentía como en otra dimensión, arrasó con toda mi vida”, expresó la actriz, describiendo cómo su expareja controlaba cada aspecto de su vida y la mantenía aislada. Incluso cuando era golpeada, su agresor intentaba justificar sus acciones como beneficiosas para ella.
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La situación llegó a tal extremo que Laura Vignatti se ausentó de sus grabaciones en la telenovela “Mi secreto” debido a las lesiones sufridas y al control ejercido por su expareja. Finalmente, logró escapar de la casa donde la tenía prácticamente secuestrada un 25 de diciembre, contactando a su empresa para denunciar lo sucedido.
La abogada de Vignatti explicó que se han realizado cinco audiencias legales contra el agresor, Salvador, quien no se ha presentado argumentando problemas de salud que han sido desmentidos por sus propios médicos. La falta de comparecencia del agresor ante las autoridades ha generado indignación y frustración en el proceso legal.
El agresor solicitó una prórroga
A pesar de los esfuerzos por buscar justicia, la periodista Addis Tuñón informó que el agresor solicitó una prórroga más, retrasando la audiencia hasta el próximo 18 de junio. Esta situación refleja los obstáculos y desafíos que enfrentan las víctimas de violencia doméstica en su búsqueda de justicia y seguridad.
El caso de Laura Vignatti es un recordatorio de la urgente necesidad de abordar y erradicar la violencia doméstica en México y en todo el mundo, así como de fortalecer los mecanismos legales para proteger a las víctimas y garantizar que los agresores sean llevados ante la justicia.