El Parlamento Irán ha aprobado una polémica ley que endurece las sanciones contra las mujeres que se niegan a usar el velo, una prenda de vestir obligatoria en la República Islámica de Irán. Este proyecto de ley, titulado “Apoyo a la cultura de la castidad y el velo”, ha sido aprobado con 152 votos a favor, 34 en contra y siete abstenciones.
Irán aprueba ley de hasta 10 años por no usar velo
La implementación de esta ley se produce un año después de la trágica muerte de Mahsa Amini , una joven kurda iraní de 22 años que falleció en septiembre de 2022 después de ser detenida por presuntamente violar el estricto código de vestimenta para las mujeres. Su muerte desencadenó protestas en todo el país y reavivó el debate sobre las restricciones impuestas a las mujeres en Irán.
Esta nueva legislación establece sanciones financieras para aquellos que promuevan el “desnudo” o se burlen del hiyab en los medios y las redes sociales. Además, prevé multas y prohibiciones de salir del país para los dueños de empresas cuyas empleadas no cumplan con el uso del velo.
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Uno de los aspectos más controvertidos de esta ley es la imposición de penas de prisión de entre 5 y 10 años para cualquier persona que no utilice el velo o vista vestimentas consideradas “inapropiadas” en colaboración con gobiernos, medios extranjeros o grupos hostiles. Actualmente, la pena por aparecer “en público sin el velo musulmán” en Irán puede ser de 10 días a dos meses de prisión.
Es importante destacar que esta ley se ha aprobado “por un período de prueba de tres años” y aún debe recibir la aprobación final del Consejo de los Guardianes de la Constitución para convertirse en ley.
La aprobación de esta ley refleja la creciente tensión en Irán en torno a las cuestiones de género y derechos de las mujeres. En los últimos meses, se ha observado un aumento en el número de mujeres que desafían la obligación de usar el velo, especialmente en las áreas urbanas. En respuesta, las autoridades han implementado medidas cada vez más estrictas, desde el cierre de negocios hasta la vigilancia a través de cámaras en las calles.
Los conservadores, que forman la mayoría en el gobierno y el parlamento iraní, argumentan que la imposición del velo es esencial para mantener las “normas sociales” y temen que su eliminación desencadene cambios profundos en la sociedad.
Organismos de derechos humanos y la comunidad internacional han expresado su preocupación por esta nueva ley. La misión internacional independiente de la ONU, establecida después de las protestas de 2022 en Irán, ha anunciado que si la ley se implementa, “expondría a las mujeres y jóvenes a crecientes riesgos de violencia, acoso y detención arbitraria”.
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La aprobación de esta ley representa un retroceso significativo en términos de derechos de las mujeres y libertad de expresión en Irán, y ha generado críticas tanto a nivel nacional como internacional. La situación de las mujeres en Irán y la lucha por sus derechos continúa siendo un tema de gran relevancia y preocupación en la escena internacional.