Una iglesia católica en Dedham, Massachusetts, se volvió viral este viernes 5 de diciembre luego de exhibir un nacimiento navideño sin las figuras tradicionales de María, José y el Niño Jesús. En su lugar, colocaron un cartel que decía “ICE estuvo aquí”, lo que desató molestia e indignación entre diversas comunidades migrantes de la zona. El gesto se convirtió rápidamente en un símbolo de protesta frente a las políticas migratorias reforzadas bajo la administración de Donald Trump.
La parroquia de Santa Susana, conocida localmente por sus actividades comunitarias, amaneció con el controvertido pesebre en su área pública. En la vitrina donde usualmente se coloca la escena de la Sagrada Familia, solo había un letrero que simulaba una intervención de ICE, la agencia de inmigración encargada de detenciones y deportaciones. Para muchos residentes, el mensaje fue interpretado como una burla o una provocación en un momento especialmente tenso para la comunidad migrante.
Un mensaje que buscaba llamar la atención
Junto al primer cartel, había un segundo aviso que decía: “La Sagrada Familia está a salvo en el Santuario de nuestra Iglesia. Si ves a ICE, llama a LUCE”, en referencia a la red de justicia para inmigrantes de Massachusetts.
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El mensaje complementario, aunque más explícito en su intención de apoyo, no logró contener la ola de críticas que comenzó a inundar redes sociales y medios locales.
Videos e imágenes del nacimiento se compartieron rápidamente, destacando el impacto emocional que generó en quienes han vivido de cerca los recientes operativos de ICE. En ciudades como Boston —a solo kilómetros de Dedham— se han reportado al menos 54 mil detenciones solo en el mes de noviembre, producto de los operativos intensificados.
El reverendo defiende su decisión
Ante la polémica, el reverendo Stephen Jonsosa aclaró que él mismo fue quien propuso el segundo cartel, con la intención de generar reflexión en la comunidad. Explicó que la idea surgió en medio del ambiente de temor causado por las redadas migratorias y buscaba visibilizar la realidad que enfrentan miles de familias en Estados Unidos.
“¿Cuál es el objetivo de esto? Ayudar a la gente a reconocer la difícil situación de las personas necesitadas y cómo es que las estamos tratando. La Navidad debería sacar lo mejor de las personas”, afirmó Jonsosa.
Divisiones dentro de la comunidad católica
Sin embargo, no todos estuvieron de acuerdo con el gesto. C. J. Doyle, director ejecutivo de la Liga de Acción Católica de Massachusetts, calificó el mensaje como divisivo, irrespetuoso y contrario al espíritu navideño. Para él, la instalación no ayuda a fomentar la unidad en tiempos de tensión.
Aun así, el nacimiento sin la Sagrada Familia ya se ha convertido en uno de los símbolos más comentados de esta temporada, generando un debate profundo sobre fe, migración y responsabilidad social dentro de la Iglesia.
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