En Tehuacán, Puebla, un perrito llamado Fénix ha conmovido a la comunidad tras sobrevivir a un incendio provocado por una turba enardecida.
El 22 de mayo, en la colonia Niños Héroes, un grupo de personas atacó una vivienda con cócteles molotov, como represalia por la agresión de un vendedor de fruta presuntamente cometida por uno de los habitantes del domicilio.
Fénix, el perrito rescatado
Durante el ataque, la propietaria de la casa fue evacuada por la policía. Sin embargo, en medio del caos, dejó atrás a su mascota: un pequeño perro que hasta entonces vivía tranquilamente como parte de la familia. La casa fue incendiada, y Fénix, atrapado en su interior, sufrió quemaduras en su lomo, patas traseras y cojinetes.
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Pocas horas después del incidente, la Asociación Civil Animalista TAC emitió una alerta a la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) y al Instituto de Bienestar Animal (IBA). Vecinos habían reportado que en la vivienda atacada vivían animales domésticos, por lo que se activó un protocolo de rescate.
En entrevista, Patricia Aguilar, titular de TAC, relató cómo su equipo se coordinó con la policía municipal de Tehuacán para ingresar al inmueble. Al llegar, encontraron a Fénix herido, confundido y desconfiado, pero aún con vida.
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El animal fue trasladado de inmediato a las instalaciones clínicas de TAC, donde recibió atención veterinaria. Fue bautizado como Fénix, en alusión al ave mitológica que resurge de las cenizas, un símbolo de su lucha y supervivencia.
Renacer entre cenizas: una reflexión sobre la empatía
Fénix continúa en recuperación bajo el cuidado de TAC. Las heridas físicas sanan poco a poco, pero su historia deja una profunda lección. Patricia Aguilar reflexiona: “El daño que se generó contra alguien que no la debía ni la temía… esos fueron los animales. No solamente afectamos cuatro paredes, afectamos a los inocentes”.
Mientras avanzan las investigaciones y se habla de la detención de los implicados en el altercado que originó la tragedia, nadie de la familia original ha reclamado al perrito.
Sin embargo, bajo el cuidado de sus nuevos protectores, Fénix inicia una nueva vida. Desde las ampollas y las cenizas, este lomito renace con fuerza y esperanza.
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