Un reciente estudio publicado en la revista Chemosphere ha generado preocupación sobre la presencia de sustancias químicas tóxicas en objetos de plástico negro, como espátulas, bandejas de sushi y juguetes infantiles.
Estos productos podrían contener retardantes de llama, compuestos añadidos a plásticos desde la década de 1970 para prevenir incendios, pero que han sido señalados por su toxicidad.
Principales hallazgos del estudio sobre el plástico negro
Aunque el uso de retardantes de llama ha disminuido debido a su relación con riesgos para la salud, algunas de estas sustancias han reaparecido en productos domésticos fabricados con plásticos reciclados provenientes de residuos electrónicos. Esto ocurre porque las normativas que restringen estos químicos no siempre se aplican al reciclaje.
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Según Joseph Allen, profesor de salud ambiental en la Universidad de Harvard, el hallazgo de estas sustancias en productos reciclados evidencia que “pueden afectarnos por segunda vez si no tenemos cuidado”.
El estudio analizó más de 200 artículos de plástico negro y encontró retardantes de llama en 17 de ellos. Algunos contenían decaBDE, una sustancia prohibida por la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. en 2021 debido a su vinculación con el cáncer.
Riesgos asociados a los retardantes de llama
El nivel de exposición determina el riesgo para la salud. Los estudios han demostrado que estas sustancias pueden filtrarse de los plásticos, especialmente cuando se calientan. A niveles elevados, los retardantes de llama se han asociado con efectos como:
- Alteraciones endocrinas.
- Problemas reproductivos.
- Déficits en el neurodesarrollo.
- Mayor riesgo de cáncer.
En particular, la exposición durante el embarazo puede ser perjudicial. Un estudio reciente indicó que las mujeres embarazadas expuestas a estas sustancias tienen mayor probabilidad de parto prematuro. Además, sus hijos podrían presentar déficits en el desarrollo neurológico.
Identificar los productos de plástico negro con retardantes de llama es complicado para los consumidores. Como medida preventiva, se recomienda evitar plásticos reciclados en utensilios de cocina y reducir la exposición, especialmente en condiciones de calor.
Este problema subraya la necesidad de implementar regulaciones estrictas para los materiales reciclados y garantizar que no pongan en riesgo la salud, promoviendo un reciclaje más seguro y responsable.