En medio de una creciente tensión entre gigantes tecnológicos, Elon Musk, fundador de la empresa de inteligencia artificial xAI, anunció que planea demandar a Apple por supuestas prácticas anticompetitivas. El magnate asegura que la compañía de Cupertino está manipulando deliberadamente la App Store para favorecer la aplicación ChatGPT de OpenAI, dificultando así que otros desarrolladores puedan competir en igualdad de condiciones.
Las acusaciones de Musk contra Apple
Según Musk, la App Store impide que cualquier otra empresa de IA —excepto OpenAI— alcance el primer lugar en sus clasificaciones. Calificó esta situación como una “violación inequívoca” de las leyes antimonopolio y advirtió que xAI presentará la demanda de inmediato.
En redes sociales, el empresario expresó su molestia: aunque su plataforma X ocupa el primer puesto en la categoría de noticias y su chatbot Grok figura en el quinto lugar general, ninguno aparece en la sección “Must Have” (o “Imprescindibles”) de la tienda de aplicaciones de Apple.
La respuesta de Apple
Apple rechazó las acusaciones y afirmó que sus rankings y recomendaciones se basan en criterios objetivos y justos, combinando algoritmos y curaduría editorial. La compañía defendió que el sistema está diseñado para destacar aplicaciones relevantes según la experiencia de usuario y no por favoritismos corporativos.
El CEO de OpenAI, Sam Altman, respondió de forma contundente, asegurando que los señalamientos de Musk carecen de fundamento. Además, le recordó que ha utilizado X (antes Twitter) para favorecer sus propios intereses, en lo que calificó como una estrategia de beneficio personal.
La disputa no es nueva: Musk y Altman fueron cofundadores de OpenAI en 2015, pero su relación se deterioró con el tiempo, derivando en un enfrentamiento público por el liderazgo en la inteligencia artificial.
Contexto legal y antecedentes de Apple
Este nuevo conflicto llega en un momento delicado para Apple. En abril, una corte estadounidense determinó que la compañía violó una orden judicial relacionada con prácticas anticompetitivas en la App Store. Asimismo, la Unión Europea multó a Apple con 500 millones de euros por restringir que los desarrolladores ofrecieran alternativas fuera de su ecosistema.
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