En su discurso inaugural tras asumir nuevamente la presidencia, Donald Trump anunció que su gobierno adoptará como política oficial el reconocimiento exclusivo de dos géneros: masculino y femenino.
Esta medida, presentada como una acción destinada a “proteger a las mujeres” y garantizar “precisión legal”, busca desmantelar políticas anteriores que permitían el reconocimiento de un tercer género y promovían iniciativas de diversidad, equidad e inclusión (DEI).
“Desde hoy, será la política oficial del gobierno estadounidense que solo hay dos géneros, hombre y mujer. Vamos a forjar una sociedad basada en el mérito, sin considerar etnia ni color”, afirmó Trump.
Donald Trump y el fin de las iniciativas de diversidad
Trump también detalló que eliminará los programas federales diseñados para corregir desigualdades históricas, argumentando que estas políticas perjudican a los hombres blancos.
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Según un funcionario cercano a la administración, se tomarán medidas adicionales para desmantelar las iniciativas DEI en el gobierno federal, lo que incluye la redefinición de términos legales relacionados con género y sexo.
La nueva orden obligaría a las agencias federales a utilizar únicamente el término “sexo” en lugar de “género” y a garantizar que documentos oficiales, como pasaportes y visas, reflejen exclusivamente el sexo biológico de las personas.
@paolarojas 🇺🇸Trump: ‘La política de Estados Unidos reconoce solo dos géneros’ Trump #DonaldTrump #CasaBlanca #Género #Diversidad
Además, la medida protegería los espacios exclusivos para mujeres en instalaciones como prisiones y refugios para víctimas de violación.
Desafíos legales en el mandado de Trump
La implementación de estas órdenes ha generado preocupación entre los grupos de derechos civiles, quienes anticipan una ola de impugnaciones legales. Las organizaciones que defienden los derechos de las personas transgénero advierten que las políticas propuestas violan principios básicos de igualdad y representan un retroceso en los avances logrados en las últimas décadas.
Trump también reiteró su postura contra la participación de atletas transgénero en deportes femeninos, afirmando que esto otorga una ventaja injusta. Durante su campaña, dedicó millones de dólares a anuncios en contra de la ideología de género, galvanizando a su base conservadora.
El anuncio de Donald Trump coincide con una creciente oposición conservadora hacia las políticas de diversidad en empresas y universidades. Tras la prohibición de la acción afirmativa en las admisiones universitarias por la Corte Suprema en 2023, varias corporaciones han reducido o eliminado sus programas de DEI.
Esta nueva política representa un desafío para la administración Trump, que enfrenta la tarea de implementar estas órdenes en medio de un panorama polarizado y con posibles repercusiones legales y sociales.
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